Cuando pase el temblor 7 / por: Carlos Benedetto

Cuando pase el temblor 7

 

En la penúltima clase del Seminario Después del temblor del Instituto Patria (19 de septiembre pasado), le tocó disertar a Debora Giorgi, Licenciada en Economía y actual Secretaria de Producción de La Matanza, Provincia de Buenos Aires. Entre 2010 y 2015 había sido ministra nacional de Industria, como asimismo había ocupado varios puestos relacionados con la minería. Fue consultora del BID, del Banco Mundial y de la UIA, entre otras actividades.

 

Giorgi disertó sobre los desafíos para la producción en la post-pandemia y comenzó haciendo una cronología de las revoluciones industriales (estamos en la cuarta). “Se trata de ver, en todas las etapas, cómo la tecnología influye en el trabajo”.

 

Queda claro, a juzgar por la ilustración que acompaña a esta nota y que es de autoría de la propia Giorgi, que estamos en plena cuarta revolución industrial virtual, cibernética, al estilo de lo que planteara El dilema de las redes sociales, en Netflix. Esta película documental es altamente recomendable para que pueda apreciarse dónde estamos parados  frente al mundo de las comunicaciones y de las manipulaciones.

 

 

Las fechas tentativas del inicio de las revoluciones fueron 1770 (el carbón como energía), 1870 (petróleo y electricidad como energía), 1960 (aparición de las primeras PCs -computadoras personales-) y 1990, lo que señala claramente la aceleración histórica que se está experimentando a partir de los últimos sesenta años. Giorgi señala además que, y este comentario es del autor de esta nota, el hombre ha construido una maquinaria de la que terminó dependiendo, o que terminó manejándolo a él, como en la saga de Terminator, sobre todo la tercera parte.

 

La información que reúnen Google, Apple, Facebook, Amazon -GAFAM-, Netflix, etc.; la “big data” que permite controlar a las personas y conocer sus gustos, sus apetencias, sus inclinaciones de consumo. “Se dice incluso que estas empresas son las “señoras feudales” de la modernidad”.

 

Esas empresas son propietarias de los datos, de todos los datos, sobre cada individuo. Y los individuos no sabemos qué saben ellas de nosotros. A partir de ese conocimiento, ellas ordenan la producción de cosas según nuestras “necesidades” inconscientes. Si esas necesidades no existen las crean, y de esa manera, el individuo, yo, ustedes, todos, somos el producto final; ya no personas libres, sino meros destinatarios de un mercado que incluso regula nuestras necesidades. ¿Alguien se puso a pensar, por ejemplo, por qué Facebook es gratis?

 

De inmediato, Giorgi advierte la importancia de China como potencia emergente desde 1980, pero con mayor ímpetu desde 2014. China está creciendo más que Estados Unidos. Advierte varios fenómenos para no subestimar:

• “Profundización de la concentración del ingreso: excluye consumidores por caída del empleo y el salario. Alto endeudamiento de los hogares. Desindustrialización.
• “Off shoring: cadenas globales de producción cada vez más largas pero más concentradas. Los buitres financieros también son buitres que atracan la producción y el trabajo.
• “Transitando entre la cuarta y quinta revolución industrial.
• “El poderío de las GAFAM. EEUU y China ¿disputa entre tecnologías de GAFAM y 5 G?
• “China: nuevo Programa Plurianual “Hecho en China”, y la doble vía. Nueva ruta de la seda”.

 

 

Luego advierte que la crisis de 2007/2008 aún no fue superada:

• “Las hipotecas subprime fueron un “artilugio” financiero que generó enormes ganancias al sector financiero a costa de generar “una capacidad de compra ficticia” a los hogares norteamericanos empobrecidos.
• “En EEUU se rescatan bancos y grandes empresas pero los ciudadanos perdieron sus casas, y muchos fueron excluidos del sistema. La esperanza de vida del hombre blanco está cayendo. La crisis se extendió a la Unión Europea (UE), aplicando planes de ajustes fuertes a griegos, españoles e italianos.
• “En América Latina repercute fuertemente el bajo endeudamiento local, y las transferencias para dinamizar el consumo aseguraron una recuperación más rápida en Argentina.
• “En China la deuda crece rápidamente. Las empresas concentran la mayor parte del endeudamiento y en particular las estatales que tienen menores rendimientos que las compañías del sector privado”.

 

Aclaramos: las hipotecas subprime son aquellos créditos que se otorgan, en monto, por encima de la capacidad de pago de quien toma el crédito. ¿Recuerdan a Vicentín? lo mismo pero a escala global. Esto es lo que está sucediendo en España, en EEUU, en todo Occidente… excepto en algunos países como Argentina, la Venezuela bolivariana y en general los países gobernados por los aborrecidos populismos”

 

Luego, continúa la expositora, la crisis se profundiza:

• “Aparece el Off shoring… desabastecimiento mundial.
• “Mercado de trabajo vulnerable: crecimiento del desempleo, pérdida de horas de trabajo, aumento de la informalidad, la desigualdad laboral de las mujeres, el teletrabajo preservando derechos.
• “Los sistemas de salud colapsándose por el ajuste permanente.
• “La desatención al reguardo del cambio climático, la no paridad de las mujeres, los flujos migratorios, el hacinamiento… todos factores que propagan el virus y si bien no trata a todos por igual, si afecta la actividad económica”.

 

Y ya que hablamos de los populismos, la disertante señaló que, en ese contexto internacional negativo, la Década Ganada (2003-2015) se caracterizó por decisiones que fueron a contramano de esa crisis:

• “Tipo de cambio diferencial como instrumento de política industrial: derechos de exportación diferenciales para bienes industriales.
• “Política industrial: Bicentenario, parques industriales, Industria Electrónica, automotriz, bienes de capital y software.
• “La política PyME como respuesta a las asimetrías en el acceso al financiamiento: Fonapyme, Fogapyme, PACC, Línea Financiamiento BCRA.
• “Aglomerados Productivos: Pi-TEC y Plan Mejora Competitividad (estos son MinCYT) y FONTAR para modernización tecnológica.
• “Comercio Administrado: Licencias No Automáticas, valores criterio, veedores en aduana, aduanas especiales, normas técnicas, sanitarias y fitosanitarias.
• “La política científica y tecnológica: Fondos de Innovación Tecnológica Sectorial, Nanotecnología, Bio Vacunas, TIC, Salud, Energía Solar, Agro-Industria, Agro Biotecnología. Fortalecimiento de CNEA, INVAP, INTI, INTA.
• “El Estado como impulsor de grandes proyectos estratégicos: Energía Nuclear, AR-SAT, Lanzador Satelital, YPF.
• “Compras Estatales y Desarrollo de Proveedores: YPF, Salud (vacunas, banco nacional de drogas oncológicas) y Defensa. Maquinaria agrícola, motos, equipamiento médico.
• “Apoyo en momentos de crisis: RePro, FGS, Ahora 12”.

 

Esto explicaría por qué el neoliberalismo definió a la década ganada como “pesada herencia”. El bienestar del pueblo es una carga que ellos no pueden soportar. Por reacción, según Giorgi, las políticas de Macri tuvieron efectos nefastos:

• “Valor agregado de la Producción en retroceso.
• “Caída de exportación de manufacturas (MOI y MOA).
• “Destrucción de empresas y empleo.
• “Los ganadores y perdedores: estructura de costos pymes.
• “Pulverizó el salario, la AUH y las jubilaciones.
• “Desplome del consumo per cápita.
• “Apertura importadora.
• “Desindustrialización.
• “Tarifazos”.

 

La consecuencia de todo esto es una pobreza generalizada y la sumisión absoluta a los poderes económicos internacionales. No estamos diciendo nada nuevo ¿no?

 

Lo que Giorgi rescata es la política económica iniciada por este gobierno, el de Alberto, el de la cuarentena obligada, que se resume así:

• “Renegociación sostenible de la deuda.
• “Creciente estabilidad nominal y cambiaria (sin mayor apreciación).
• “Grandes obras públicas de infraestructura.
• “Agresiva política de promoción de la producción y el “Compre Nacional’’.
• “Transformación del paradigma de la política industrial: del enfoque de la rentabilidad al enfoque del riesgo.”

 

Pero, cuando le tocó el turno a la minería y al petróleo, Giorgi rescató las nuevas tecnologías aportadas por las corporaciones extranjeras. No hizo referencias a los métodos “no convencionales” y eso nos pareció preocupante. Dio muchos datos duros sobre estos temas, pero sin tener en cuenta lo que el ministro Salvarezza había dicho en una clase anterior sobre la necesidad de valorar las Ciencias Sociales  (ver nuestra nota número 2) Muchos datos duros, apoyados en las ciencias duras, pero poca ciencia social. Esa parte no nos gustó mucho.

 

 

Nos gustó más el otro disertante, el Dr. Matías Strasorier, médico veterinario cordobés, quien planteó la necesidad de un nuevo modelo alimentario. “La crisis del sistema global fue agudizada por el COVID”, dijo al arrancar. “La principal contradicción, que empezó hace 500 años en América, es la existencia de minorías dominantes que viven bien y sin trabajar. El macrismo consolidó el 32% de pobreza extrema”.

 

Todo esto produjo un agotamiento ambiental: “la ONU pronostica la destrucción del planeta como consecuencia del deshielo del Polo Norte, aunque la ONU no habla de la acción del hombre y del capitalismo sobre esto. Si la acumulación de riquezas por parte de unos pocos continúa, el planeta seguirá siendo destruido”.

 

Luego disparó: “la Pampa Húmeda es productora de alimentos, pero para exportar y a costa del ambiente; el producto de esa exportación se concentra en pocas manos, incluso transnacionales, las que controlan la comercialización (Bunge, Cargill, Bayer-Monsanto, Singenta, Nestlé, Wallmart, Carrefour, etc.). El alimento ha dejado de tener un fin social y el impacto ambiental no es tenido en cuenta. ‘El campo’ es competitivo, pero no resuelve la pobreza y el hambre”.

 

Y se pregunta “¿debemos seguir con ese modelo? ¿Alcanza con el Estado para resolver esto?. No, hay que apoyarse en las organizaciones sociales”, lo cual ya había sido afirmado por Claudia Bernazza en una clase anterior.

 

“En Argentina hay una contradicción entre ‘Patria Cerealera’ y ‘Patria Productiva’. Viene ganando la primera”. Un comentario lapidario, sin dudas.

 

Y esto viene a cuento de que la principal crítica de cierta izquierda es que el kirchnerismo es lo mismo que Macri, porque se trata de dos proyectos burgueses. Es cierto, pero sólo parcialmente: el peronismo y su continuación histórica, el kirchnerismo, son un proyecto de una burguesía comercial e industrial que puja por desplazar del poder a la burguesía agropecuaria y financiera, y que está aliado a la clase trabajadora. A eso se refiere el veterinario cuando habla de las dos “patrias” en litigio. Por más macanas que esté haciendo Alberto, Alberto y Macri no son lo mismo.

 

Al referirse al mentado proyecto de la megaproducción de cerdos, reconoce que es “un  tema que nos está interpelando. Hay 4.300 unidades productivas y el 98% es consumo interno. Pero el 80% se concentra en Córdoba, Entre ríos, Santa Fe y Buenos Aires. La producción de cerdo sobra, pero hay regiones donde no se come cerdo. ¿Se puede pensar un plan federal porcino que asegure alimentación proteínica para todos y exportación a la vez? ¿Es posible crear trabajo digno donde el hambre y la pobreza no sean parte del paisaje? Vemos indicadores económicos, pero no indicadores de impacto humano”. Refiriéndose a los proyectos agroecológicos de las grandes corporaciones, se pregunta… “¿puede haber producción agropecuaria limpia, agroecológica, con trabajo infantil? ¿Las ordeñadoras que se manejan desde una PC, benefician a los trabajadores?”

 

 

Luego reconoce que estamos el plena revolución virtual y se pregunta si “seremos PATRIA o COLONIA, pero digital. La informática puede mejorar la economía o puede destruir todo. Hay una unión de lo biológico con lo virtual. ¿Será posible congeniar todo eso, la nanotecnología y la protección ambiental?”.

 

Y se contesta que sí, que “se puede generar una big data nuestra y para nosotros. Una red de drones, PCs, satélites, que permitan optimizar la producción agropecuaria. Cuando funcione la 5G eso va a ser increíble. Pero en el centro hay que poner a las personas, a los productores, que son los que generan riqueza”.

 

Y remató: “Cuando pase el temblor vamos a tener un mundo donde la economía va a estar toda digitalizada, pero debe garantizarse la soberanía alimentaria. El modelo tiene como base la democratización del conocimiento para todos los trabajadores; debe promover el desarrollo con inclusión. El modelo debe proteger la soberanía alimentaria pero también los recursos naturales. Desarrollo territorial con inclusión social. Arraigo con movilización social ascendente. Soberanía alimentaria, pero también del conocimiento”.

 

Las dos charlas completas pueden verse en https://youtu.be/lfhYm1wQyUg . Dos horas, que incluyen preguntas y respuestas de los participantes de todo el país. Para no perdérselas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Columnista invitado

Carlos Benedetto

Museólogo, jubilado docente y presidente de la Federación Argentina de Espeleología. Escritor y periodista. Miembro de la Comisión de Ambiente del Instituto  Patria. Director del quincenario Sin Pelos en la Lengua, Malargüe.

 

 

 

 

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