21 de noviembre de 2024
07:19hs.
Mama thai, la bisabuela guaraní, hija del cacique de monte caseros, corrientes
Segunda parte
(viene de la edición anterior)
Entonces sentí necesidad de comer unos ricos frutos de mburucuyá, con la bella flor de la pasionaria, que además de ser salvada así por los jesuitas, unos sabios para haber logrado salvar esta planta del exterminio al que fue sometida casi toda la flora autóctona que ayudaría a paliar el hambre si la conociéramos…
Pero como soñé con mi abuela Isabel, cuyo onomástico debe ser por Santa Isabel de Hungría, la santa de los gitanos…
…porque ni sikiera puedo expresar lo que me contaron esos sueños…
…solamente de imaginar lo que puede haber sido…
…en el mismo día del cumpleaños de mi prima Ana María Dolores Dupleich Briones de Goicochea…
…sobrina, como yo, de mi tío Horacio Briones y Marrero…
…a kién yo, con absoluta ingenuidad lo preparé para rendir “Historia Argentina” para su ascenso a…
…y era entonces, o después, 2º comandante de gendarmería y sacó un diez felicitado…
Y entonces, me contaba, feliz, casi exactamente como me contó, el otro año mi hija…
…tuve un alumno particular…
…para que lo prepare para rendir Historia…
-Ah, debe ser medio imposible… Porque ya sabemos que Historia es considerada una materia fácil… Difíciles son, en cambio, lengua, matemáticas e inglés…
-Es un policía… Está estudiando para policía…
En ese mismo momento asoman los recuerdos del espanto, la culpabilidad… Eso que es como una mochila pesada de algo que está como clavado en mis hombros…
Obviamente no era el momento para hacérselo explícito a mi hija menor, ya docente, trabajando como maestra de una escuela de Cipolletti… Y además estudiando Historia en Neuquén, en la universidad que tiene algo de la onda de la Universidad del Sur de mis dorados años setenta…
-¿Y en cuánto tiempo?… le comento, como al pasar, esos récords, la cantidad de alumnos que preparé para aprobar decentemente Historia… y tan pocos desaprobados…
Se lo dije a mi correctora de verano…
…vos tenés algo de la onda de uno de los pocos alumnos desaprobados: Castillito…
Era el mejor alumno para todos los actos, excelente en malambo y todas las danzas folcklóricas…
Pero en Historia… ¡ejem!
…Parecía como que ponía la cara y se iba… Como el Felipito de Mafalda…
Fue cuando me dijo que se iba a ir a estudiar y que tenía que aprobar Historia Argentina para pasar…
-¿Vas a estudiar folcklore?-.
-No. para policía-.
Yo debo haberlo mirado, preguntándome cómo es posible que…
Tenía tres materias para pasar de año. Y aprobó dos nomás. Historia era la tercera…
Entonces no sabía absolutamente nada de nada… Era diciembre…
-Preparate para marzo…-.
En marzo tampoco daba para aprobarlo. Porque hay alumnos que están en ese límite difuso del cuatro o cinco que si sigue participando puede llegar a un seis, de onda.
Justo estaba con ese tema… Y me fui a meditar porque había algo que me había angustiado…
Era ese sonido sereno de una buena guitarra criolla… Por el canal Encuentro…
Y supongo que así sería ese pibe, el que se preparaba para policía… A kién no conocí. Porque si iba a la casa de las wikis, el tema, la consigna era:
-Ma, por favor no me hagás pasar papelones con tus comentarios, con las charlas de cualquier tema con cualquiera…-.
Supongo que mi mirada debe ser como para los pibes pasar por la mirada de la suegra…
Como me decía Pablito:
-Marcela kiere conocerte, porque vos sos como la hermana-suegra-.
Conocí un ex novio que era un músico de guitarra criolla…
…como los de las milongas camperas del canal Encuentro…
Y en ese mismo tiempo apareció ese alumno imposible…
-No te imaginás, ma, qué difícil…-.
– ¿Le dijiste que te pagara por hora?… mirá que tuve cada experiencia…
Como la de mi amiga, la mejor poetisa local. Anahí, mi vecina.
Solo mirando esa noticia del youtube…
…de la piba que dejó helado al crítico más feroz de arte de no sé qué sitio.
Parecía que uno había dicho que se la imaginaba como…
…la poetisa del único encuentro de la biblioteca grutense a la que fui, la penúltima luna llena…
…llena de todos los que se saludan como grandes amigos de siempre…
Y, como estaba la compañera de tai chi recién llegada, le vi algo del aire que debemos tener los recién llegados…
-Papita p`al loro… Incauta docente, madre de otra docente… Que cree que es fácil llegar a serlo y más aún akí.
Por eso comprendo a quienes somos sobrevivientes…
Algo raro debemos tener… Un instinto como de perro viejo…
Por eso después de haber tenido esa larga charla con mi vecina/amiga de esa fe absolutamente férrea. Como la de Nancy Vecchio, justamente. Son esas personas con fe de añares, amasadas con el tiempo, diría. Con kiénes, en apenas un ratito nos contamos las novedades que nos angustian… Los temas vitales, urgentes.
Mientras, yo seguía escribiendo… y corrigiendo…
…de las largas horas del horror posterior… que fue la causa de mi intento de suicidio el día martes 13 de julio de 1976… Y solamente yo esperaba poder terminar con esa culpa, absolutamente silenciosa…
…de tal vez ser responsable de eso: yo fui la única responsable de que haya aprobado ese examen de Historia Argentina con un diez felicitado…
…y tal vez lo que se discutía en ese sueño… de la noche del recital del Indio Solari… del más espantoso terror de solo imaginar que…
Mejor dejo a kiénes puedan saber cómo hacer llegar a kiénes comprendan los por qué de esa urgencia…
En el original de la versión CORREGIDA y ampliada… Porque parecía se había extraviado misteriosamente y no kedaba copia alguna. Inclusive no la tenían las personas a kiénes les había regalado copias…
Como para seguir aumentando mi stress…
-¿Tenés el librito que te regalé de “LA SONRISA DE LA LUNA”?-.
-¿A mí? ¿Estás segura? ¿Cómo decís que se llama?-.
Y justo cuando ya lo había terminado…
…lo busco ahora, en la noche de San Patricio, la noche del BEER FEST… Busco en mi compu todo lo que había escrito en estas noches de luna llena…Esos tiempos que son, como lo contaba Pablo Béker:
-Hay un tiempo de inspiración, un pokito, apenas, un instante y después son los largos tiempos de transpiración.
Y justo abro la compu y nada. Página en blanco. Missing. No está, se borró, desapareció.
Entonces da para cuando llame a mi hermana en vez de estar ya tranki… Porque pude kitarme ese peso de la mochila de mi hombro, se hubiera borrado todo. Como si no hubiese estado horas y horas escribiendo…
Para sentirme otra vez como en “El mito de Sísifo” de Albert Camus.
Otra vez abajo, otra vez se fue todo…
No está. Desaparecieron las largas horas de escribir, urgente, con miedo a que otra vez desaparezca…
Y yo feliz, ya está. Todo está escrito, como las palabras de Alah, El Único. Para revisar la copia y después imprimir, listo el pollo y pelada la gallina.
Y si no aparece…
Yo, con esos sonidos guturales… Esos gritos a los alaridos… Como para denuncia de los vecinos:
-Está mal. Pobre. Nadie sabe por qué se brotó. Es algo urgente. Necesita una internación. Urgente, delira…
Y se le suma la explicación de la última charla con Tehia:
-¿Cómo estás hermanita?-.
Porque después del kilombete familiar de cómo es que había hecho público, en el mono-chat, que con ese nombre a cualquier súper espía de la cana se le ocurre debe ser algo de las comunicaciones secretas relacionadas con “los monos” esa misteriosa banda de súper traficantes de droga incautada… y si todos esos kilos de panes de marihuana estuviesen relacionados con las comunicaciones de nosotros, un familión desparramado por todos lados…
-Akí, por wsp, hay comunicaciones top secret, en clave…-.
Los celulares determinan la ubicación, las coordenadas exactas.
Todo lo que trabajosamente había escrito y corregido…
Había desaparecido todo lo escrito… Sin ninguna necesidad de curso top secret de “la bruja”:
-Te lo dije, che…-.
Mientras hay preguntas que me resultan absolutamente imposibles de comprender…
Como el hecho de que existan aún kienes jamás escucharon un tema de “Los redonditos de ricota”…
…entonces, es tiempo de sólo respirar…
…para poder descansar bien, es infalible un método muuuy estudiado por los creativos como Miguel Grimberg… Con kien estudié junto a los que ahora están bien arriba… Onda de los super crack de la NBA o algo similar… Para intentar que los infames en vez de hacer el juego sucio de siempre…
-Ahora usted los sigue a sol y sombra… y cada vez que intente algo… usted les corta todo…
Como me contó…
-¿Podes creer que no pude ir? Porque no tenía la tarjeta del bondi. Y el infeliz del kiosco no sabía… O se le rompió la máquina de…
…se siente la orden: APRIETE PASO 2:
…ahora le hacen sentir que es la pirada…
…otra de las locas hippies de tu drema…
…siempre con gente rara… Que te van a dejar en banda… Pobre hija mía… Todos en pedo y vaya a saber qué drogas raras…
Como para que yo kedara aisladísima…
Con esos atakes de pánico que para la formación de los psi tradicionales es algo absurdo…
A mi psi… Buena onda, excelente predisposición, cuidando su juego… Entonces a exprimirla a fondo…
Yo se lo había dicho…
-Si te vas de vacaciones, ¿podés nombrar una suplente?-.
-Imposible…-.
-Alguien que nosotras conozcamos… La piba casi igualita a Ivannita que era observadora no participante… que estudiaba psi en una buena universidad… la de Córdoba, casi recibida…
La anterior era estudiante avanzada de magisterio… Tal vez haya escuchado nuestras historias de escuela:
…de los pibes pasados de rosca… Una era la madre del pibe que iba en moto al salir de la fiesta del colegio secundario y venían a Las grutas… Y justo un auto se patinó en la ruta, en la curva o algo así…
Yo había escuchado otras versiones: que akí había unos chabones onda neo-nazis que no dejan pasar a los de la onda de mi gatito Turkestan senior. El michi fue vilmente asesinado por su aire de morochito indómito… Como su amigo, Garufa, su opuesto, un manso perrazo aire hippie diría, súper cuidado, porque Yery y su marido hasta llevaban agua y un recipiente para que tomara el perrazo. También asesinado… Como los 240 o más perros asesinados el otro año…
Fue entonces que Manchita se puso a ladrar cuando lo hablábamos con la piba en el banco…
El banco lleno… de posibles compradores de una mansión en este paraíso… Para las fotos e historias del toudo bem para unos… Y hacer mierda a los que vemos el otro lado de las cosas.
-Simple, borrá todo. Es un vil escrache. Nos van a hundir y no vamos a tener ni para comer.
Mensaje en un viejo celu:
-Borrá todo, que la loca está escribiendo… Era una fija… La luna llena dicen que es la de los locos… Los brota…
Envíe a sus mejores hombres para que simplemente no salga nada…
(continuará)
Columnista invitada
Lucía Isabel Briones Costa
“Mi pecado fue terrible: quise llenar de estrellas el corazón de los hombres” decía el poeta… Desde los lejanos años de estudiante del profesorado en Historia en la Universidad Nacional del Sur, dediqué mi vida a la educación. En los tiempos previos a la dictadura de 1976 enseñaba en una vieja aula de la Facultad de Agronomía el bachillerato de adultos, tarea compartida con los compañeros, casi todos presos políticos después en Bahía Blanca. Cuando era rector Remus Tetu se hizo una razzia contra docentes, no docentes y estudiantes, especialmente contra los alumnos de Humanidades, Sociología y Economía. Estaba terminando mi carrera, cursando las últimas materias cuando fui detenida y puesta a disposición del PEN, el Poder Ejecutivo de la Nación, durante tres años y tres meses, hasta diciembre de 1978. Estuve en las cárceles de Villa Floresta, Olmos, Devoto y los tres últimos meses en la U20, la cárcel dentro del Hospital Borda, donde un prolijo tratamiento con drogas psiquiátricas hizo borrar totalmente mi memoria. Así me dejaron en libertad, diciéndole a mi padre: “Su hija es irrecuperable, será un vegetal hasta el día de su muerte. Que Dios les de la Santa Resignación”. Gracias a haber encontrado la ayuda adecuada pude recuperar, poco a poco, la razón perdida. Y me fui a La Pampa, donde fui docente de escuelas primarias y secundarias en la pequeña localidad de 25 de Mayo y en el Terciario de Formación Docente de Catriel, Río Negro. Recién en 1997, pude terminar mi profesorado en la Universidad del Comahue, para cuando mis compañeras de promoción de la Universidad del Sur ya estaban por jubilarse. Luego comencé la maestría en Historia Latinoamericana de los siglos XIX y XX, la cual se interrumpió cuando la Universidad no podía pagar a los docentes, varios doctores en Historia. En ese tiempo de docente rural comencé a escribir narrativa, tarea que continué al jubilarme en el bello mar de Las Grutas, en Río Negro. Seguí escribiendo con la alegría de dar un legado en su educación a mis hijas: la mayor psicóloga y la menor, maestra y profesora de Historia, ambas egresadas también de la Universidad del Comahue.
