Una vez más el neoliberalismo, que parece una entelequia discursiva, algo lejano e inentendible, se expresa con toda la crudeza que le conocemos. Esta vez fue en Luján de Cuyo donde nuestros queridos viejos la pasaron igual de mal que en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires: al sol, sin sillas, sin ambulancias a mano.
Así “trabajan” los malcristas, los radicales derechizados. ¿Vos sabías que Sebastián Bragagnolo, el Intendente, es sobrino del Diputado Nacional Omar De Marchi -quien fuera también intendente- y es uno de los principales cómplices de Malcri? Son iguales, son lo mismo. Habilitó un sólo lugar para realizar la vacunación ¿podés creer?
Bragagnolo ni pasó por allí para controlar la tarea de los empleados del municipio que conduce. Lo más probable es que estuviera haciendo algún negocio en base al Estado, que es lo que mejor le sale a la derecha. Esto se podía prever, para que saliera todo bien. ¿Gendarmería estuvo en la seguridad? La derecha es represiva…
“En los Consultorios Externos de la Municipalidad de Luján de Cuyo (lo que alguna vez el ex intendente De Marchi inauguró como un “hospital”), se realizó la vacunación a los abuelos y abuelas con una desorganización tan grande que las personas se amontonaron en las colas y sufrieron esperas al rayo del sol. Roberto Pino, desde Radio Comunitaria Cuyum, entrevistó por este motivo a Paloma Scalco, Concejal del Frente de Todos”.