Casi desde siempre los mendocinos hemos sido sometidos a un accionar tergiversado en torno a la recolección de la uva. La palabra vendimia, que a ella me refiero, se ha despojado de su primera acepción para escribirla con mayúsculas en lo que todos conocemos como Fiesta Nacional de la Vendimia, que es algo muy distinto.
Poco tiene que ver esta bella y tradicional festividad, con la labor concreta de mujeres y hombres inclinándose entre las hileras cosechando los racimos con los que se hará el vino y sus derivados. Te hablo de la exquisita Bebida Nacional (desde hace pocos años) que fabricamos aquí. Orgullo mendocino y mundial, si los hay.
La vendimia con minúsculas se desarrolla durante toda la temporada, en jornadas al rayo del sol. Allí se evidencia el sacrificio de miles y miles. Muchas de esas personas son los obreros golondrina, que van rotando por diversos puntos del país -y de los países de la región-, realizando tareas similares en diversas cosechas.
En los hechos no hay mucho para celebrar si es a ellos y a ellas a quienes queremos reconocer. Porque también sabemos que los grandes bodegueros, hombres con gran fortuna, se viven quejando y pagan sueldos de miseria. Muchos de ellos subsidiados por el Estado, más allá de la gestión de turno y su orientación político partidaria.
Nada hay para celebrar por las pésimas condiciones laborales y los ingresos de aquellos y aquellas que extraen buena parte de la riqueza que hace grande a nuestra provincia. La exigencia ahora es para Suarez, a quien no le vemos ni referirse al tema. ¿Será porque son personas que no viven en Capital? ¿O porque “no existen”?
Apena tener que hacer esta advertencia histórica, pero es necesario refrescarnos la memoria. Los nadies, los invisibilizados que cobran salarios de miseria (aquí te comparto un recibo de sueldo) esperan respuestas oficiales en forma de políticas proactivas. También quiero que escuches las palabras de un dirigente sindical.
“La patronal bodeguera pretende que sus trabajadores coman sólo la mitad del mes
“El aumento que ha ofrecido el empresariado vitivinícola es del 30%. Teniendo en cuenta que el sindicato pide igualar el sueldo a la Canasta Básica, lo que cobraría el trabajador es la mitad del dinero que necesita para vivir todo el mes.
“Desde Radio Comunitaria Cuyum dialogamos con Miguel Rubio, Secretario de Prensa de FOEVA, donde nos anticipó que el martes que viene podrían anunciarse medidas de fuerzas.
“Roberto Pino, para FM Comunitaria Cuyum”.