Se trata de una realidad que sólo advierten quienes la padecen, sus familiares y amigos. Estar alojado en un establecimiento penitenciario, por el delito cuya condena se esté cumpliendo, no supone que los internos vivan en malas condiciones. Son personas como vos y yo que, caídos en desgracia, deben cumplir penas.
Desde hace muchos años Mendoza es una de las provincias argentinas en las que las condiciones del sistema carcelario son las más atrasadas y gravosas para quienes las padecen. Esto ha motivado hasta denuncias en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y pedidos de intervención a otros organismos internacionales.
El Gobernador Suarez lo sabe, pero elige hablarte de “su” Mendo Exit o aprovecha cada esporádica conferencia de prensa, para manifestarse sorprendido del rechazo de los mendocinos a la megaminería contaminante y el fracking. Parece que se justificara ante los empresarios de las trasnacionales, que quizás le pagan muy bien.
“Internos de Almafuerte denunciaron condiciones “inhumanas” de alojamiento
“Un grupo de internos del complejo Almafuerte interpuso un hábeas corpus por la “inhumana” condición en las que se encuentra detenido.
“Se trata de 42 personas ubicadas en el área Admisión II del complejo penitenciario, entre ellos Marcelo Araya, quienes sostienen que están alojados “en un lugar que no es destinado para habitar en forma permanente y con deficiencias en infraestructura”.
“También aseguran que “la escasa atención médica, la escasez de insumos de higiene personal, la inadecuada alimentación, el inadecuado régimen de visita familiar, la falta de control en las condiciones de detención” configuran un agravamiento ilegítimo en las condiciones de detención y “constituyen elementos y circunstancias que ponen en riesgo la integridad física y psíquica de los internos”.
“A través de esta medida judicial, los defensores del grupo de internos buscan un lugar de “alojamiento acorde”, verificándose los cupos con los que cuenta el complejo penitenciario de máxima seguridad.
“Según lo expuesto, los internos fueron trasladados por disposición de las autoridades de Almafuerte “en forma transitoria” desde el módulo V ala IV al sector Admisión II por un plazo de “pocas semanas”, aunque ya pasaron más de 65 semanas desde ese momento.
“Las áreas de Admisión del Complejo Penitenciario Almafuerte no han sido concebidos para el alojamiento de los internos en forma permanente, y por ende, sus condiciones de habitabilidad son diferentes a las de los módulos que originariamente han sido diseñados para ser habitados de esa forma”, indica el escrito.
“Las condiciones
“Previo al traslado, los internos expusieron que realizaban distintas actividades, entre ellas, un taller de carpintería, la crianza de pequeños animales, el mantenimiento de una huerta y deportes en una cancha que ellos mismos construyeron y mantenían.
“Sin embargo, actualmente el área de Admisión “no cuenta con luz natural solar, con las implicancias que esto trae desde el punto de vista sanitario, ni espacios de esparcimiento al aire libre, tal como sí poseen los módulos de alojamiento penitenciario”.
“En ese sentido, denuncian que desde su traslado tampoco se mantuvieron las actividades que desempeñaban anteriormente. “Cada trescientos sesenta (360) horas, los internos de admisión II pueden ver el sol tres (3) horas”, lo que da cuenta de la “inhumana condición ‘transitoria’ de detención” y los perjuicios que ocasiona en la salud de algunos internos.
“Otro de los agravamientos que destacan es el régimen de alimentación, que sostienen que no pasa el contenido alimentario mínimo a fines de una buena alimentación y que incumplen los protocolos de manipulación de alimentos.
“Con respecto a la higiene personal, sostienen que el suministro de elementos es insuficiente y que por cada interno se entrega cada tres meses un rollo de papel higiénico, un jabón corporal, otro para lavar la ropa y, ocasionalmente un cepillo de dientes, un dentífrico y una máquina de afeitar.
“Finalmente, los internos solicitan que se “haga lugar al Habeas Corpus interpuesto, declare la legitimidad de la situación denunciada, ordene su cese inmediato y arbitre las medidas conducentes a fin de evitar el agravamiento de las condiciones de detención de los internos alojados en el área de Admisión II del Complejo Penitenciario III Almafuerte”.
“Ampliación de la medida
“A su vez, a través de otra medida, la defensa de los internos solicitó una amplicación del habeas corpus colectivo vinculado a 26 internos que se anotaron para completar sus estudios. Sin embargo, al momento de proveerles el material, aseguran que cuentan con 11 lápices de colores, 4 lapiceras y cuatro gomas y hojas.
“Esto significa que solamente cuatro de los internos pueden contar con los elementos mínimos para su alfabetización, siendo una obligación del Estado dar los elementos indispensables para que puedan llevar a cabo la educación dentro del complejo penitenciario”.
“Elsol.com.ar
“19 de marzo de 2021”.