N’Dranghetiano, socio cómplice, o víctima de la presión y la ineptitud
Era imposible hacer mas daño que el que se hizo. Tierra arrasada, evasión, fuga, vaciamiento y entrega; endeudamiento, por cien años; saqueo infinito y asesinatos; el azote brutal de la pandemia; el 3000% de aumento en las tarifas y el descomunal aumento del costo de la vida; de los alimentos; de los medicamentos y de todo lo imprescindible para vivir… Jamás, ni el gobierno, ni el pueblo, conocieron los costos de producción de nada. Todo aumentó desmesuradamente.
En tanto, los salarios: los haberes jubilatorios y las pensiones, perdían -incesantemente-, su poder adquisitivo; fue la obra mas desquiciante de la historia y Macri (el otro Menem), lo hizo. Por otra parte, fue Alberto Fernández (AF) quien lo legalizó, negándose a gobernar, durante mas de dos años y medio.
Son mas de seis años y medio de penar; de empobrecerse; de aumentar el hambre (2014: hambre 0, memoria) y de no saber cómo hacer, para seguir viviendo. Aceptó una deuda nula de nulidad absoluta y la rubricó, para que la pague el pueblo, de acuerdo con la escuela heredada de Alsogaray, Pinedo, Martínez de Hoz, Krieger Vasena y Cavallo.
La teoría del derrame, de Cavallo, no era extraño que la implementara AF, ya que, en su gira fantástica y misteriosa, el personaje deambuló por el nacionalismo constitucionalista (la chantada de Alberto Assef, PNC); el radicalismo (secretario de Juan Vital Sourrouille); el menemismo; el cavallismo (legislador porteño y Diputado Nacional), en momentos en que era público y notorio que Cavallo era un empleado del imperio que, por ejemplo, entre otras cosas, estatizó la deuda privada -mas de una vez- y todas las tuvo que pagar el pueblo. Es una costumbre, que también repitió AF.
No solo se negó a gobernar, sino que hizo mucho daño. La legalización de una deuda ilegítima, fue una de las legalizaciones del saqueo y la caída del pueblo en la miseria. Legalizó toda la herencia maldita del macrismo. La canallesca estafa con las tarifas de energía (electricidad y gas), es una prueba mas. No corrigió nada, sino que lo profundizó. Como si el 3000%, no hubiese ocurrido, aumentó varias veces, la facturación, para que el robo pasara inadvertido; pese a haber producido miseria, angustia, desazón.
El vivía y vive, en otro mundo. Abroquelado, en la residencia de Olivos, vive su vida. El no lo hizo; el lo legalizó (todo) y cumplió con el departamento de estado; la embajada y “su amigo”, que aunque destrozara, al país y a su pueblo, continúa libre, siendo dueño del país. Porque a las mafias mediática y judicial no se las toca; ni tan siquiera se las amenaza; porque “los del palo, son del palo”.
Yrigoyen lo calificaría de miserabilidades patéticas. Su papel, al lado de Néstor, fue denigrante (no por él, ya que de lo que se trata es de estar, aunque sea traicionando), me lo contaban sus dos amigos; aparentemente íntimos: “Alberto se queja, porque lo tiene corriendo, de acá, para allá, como pibe de los mandados”. Desde que está en Balcarce 50, mil veces dijo: “antes de hacer nada, pienso qué hubiera hecho Néstor”.
Lo dije tantas veces como las que él mentía: lo hace, para hacer todo lo contrario. Mitómano, o mentiroso, que ni él cree lo que dice. La infame criminalización de la justicia (de esa mafia asesina, ruin y miserable), también le debe su aporte. No se si -como decía ayer-, “tiene muertos en el placard”, pero su complicidad con el regimen anterior -tan efusiva-, es como el abrazo con el más grande corrupto, ladrón y criminal, de toda la historia, cuando él -AF-, asumía, el 10 de diciembre del 2019.
Ahora, mientras la mafia asesina de la famiglia giudiciale comete otro crimen de lesa humanidad y trae a un canalla delincuente, de la talla del fiscal “Lucky” Luciani, de un cinismo y una hipocresía -insultante, mas que exultante-, algunos funcionarios del sistema, son reflotados, para continuar con la farsa dramática de una deuda externa, que tiene como finalidad la dependencia del monstruo del Norte, mientras aumenta la miseria del pueblo de una de las grandes potencias del mundo, invadida, ocupada, esclavizada, ésta, nuestra gloriosa Patria, poblada de cipayos y mercenarios; genocidas, por acción, o por omisión.
El estado de reacción de un pueblo perversamente entregado y pisoteado, es la última esperanza. El imperio y sus apátridas servidores, están poniendo a prueba su temple y su aguante, para destrozarlo todo y apoderarse de la vida, también, de las futuras generaciones, que llegarán al mundo sin futuro y esclavizados. Se debe avanzar ya “con los dirigentes a la cabeza o con la cabeza de los dirigentes”. Las fieras están cebadas y la tremenda impunidad existente, las anima.
2 de agosto de 2022
Columnista invitado
Carlos Valle
Docente, economista, historiador, periodista y escritor. Enlace de la Resistencia (1956). Presidente de la Asociación de Periodistas Latinoamericanos (1965-1976). Decano de los periodistas de Radio Nacional. Sindicalista y asesor gremial y político (CGT hasta 1991). Exiliado en 1962.