Pareciera que la presión devaluadora estaría retomando bríos, los formadores de precios no ceden, y ahora se abre un nuevo frente: el financiamiento en pesos del Estado.
En octubre el gobierno solo pudo refinanciar los vencimientos de la deuda interna, no obtuvo lo suficiente para cubrir también el déficit fiscal, e incluso debió pagar una tasa de interés mayor. Debió convalidar una tasa efectiva anual del 116,6%. Se obligaría a los bancos a fondearse en títulos, y hay rumores de canje de la deuda, un reperfilamiento en lenguaje de Macri.
El gobierno parece encontrarse ante el problema del trilema financiero: de 3 variables monetarias interrelacionadas solo podrá controlar 2, perdiendo control de la tercera. Tipo de cambio, tasa de interés y flujo de divisas son las variables de este trilema.
El acuerdo con el FMI incluyó un compromiso de financiamiento limitado del Banco Central al tesoro, con lo que el déficit debe ser financiado mediante endeudamiento interno, dado que el gobierno amarillo dejó al país sin acceso el crédito externo, que solo nos muestra vencimientos a pagar.
La novedad es la restricción del crédito interno, que esta semana fue más caro e insuficiente. Además parece imponerse un muro: la elección del 2023, no se obtiene financiamiento más allá del 3º trimestre del año que viene. Esto augura que el mercado financiero utilizara sus fondos para renovar su presión devaluatoria, Así el gobierno se acerca a la disyuntiva de aumentar la emisión, incumpliendo el pacto con el FMI, o profundizar el ajuste, o algún mix.
La designación de Massa como primer ministro, primus inter pares, se originó en la búsqueda de alguien capaz de controlar lo que se mostraba como una fuerte acción cambiaria que iba a forzar una fuerte devaluación. Massa aquietó la cuestión cambiaria, nunca controló la disparada inflacionaria que licuó salarios, y ahora el acceso al financiamiento interno se le complica. No se muestra como una gestión exitosa.
Dólar
La presión devaluadora no solo no cede, sino que da síntomas de reverdecer. Esta semana la brecha cambiaria también se redujo muy levemente, de un 83,4 % a un 83 %; pero las distintas cotizaciones del dólar ampliaron sus diferencias, lo que no permite suponer mayor inestabilidad cambiaria.
Esta semana el Banco Central debió realizar ventas de reservas por U$S 73 millones, y en el mes acumula ventas por U$S 360 millones. Tras terminarse el programa de subsidio al sojero vuelve el continuo drenaje de divisas.
El gobierno liberará las importaciones de las empresas que paguen con sus propias divisas sin depender del acceso al dólar oficial, Lo haría posible por el blanqueo incluido en el presupuesto.
Los títulos en moneda extranjera en octubre aumentaron más del 13 %. Podría ser una buena señal para el acceso al financiamiento externo, pero en el año han perdido hasta casi 40 % y los valores son de default profundo. Con sus valores se hace la cuenta del Riesgo País, hoy en 2600. Cabe recordar que se considera que a valores superiores a 1000 se deja de ser sujeto de crédito por el elevado riesgo. Aún estamos lejos de las buenas noticias.
Columna: Hugo Castro Pueyrredón, economista y docente de la UBA, 1 de noviembre de 2022
Precios
La inflación sigue amesetada en un 7 % mensual. Los precios que releva semanalmente vía web la consultora LCG muestran una inflación de poco más de un punto en los 8.000 precios de los alimentos y bebidas esta última semana. Con este dato, la inflación mensual alcanzó el 7,2 %.
Según la misma fuente, en la cuarta semana de octubre la suba de precios de los alimentos promedió 0,71 %, con lo que la inflación de noviembre tendría una importante desaceleración, pero noviembre estará marcado por la suba de las tarifas de los servicios públicos, colegios y expensas.
En plena negociación por Precios Justos, la Secretaría de Comercio Interior multó a Arcor, La Serenísima, Clorox y Coto por engañar a los consumidores presentando productos nuevos que de nuevos tienen poco. Las empresas los presentan como innovadores, pero en la práctica son los mismos que se encuentran dentro del acuerdo de Precios Cuidados con modificaciones casi imperceptibles en el gramaje, el sabor, el diseño de la etiqueta o el envase; aunque con diferencias muy perceptibles respecto al precio.. A las multas se suman los casos de la lavandina Ayudín y la mostaza de Unilever.
A la par se alcanzaron acuerdos con siete empresas productoras de alimentos y de bienes de higiene personal y limpieza para que se sumen al programa “Precios Justos” que prevé fijar el precio en los paquetes, los cuales se mantendrán durante 90 días. No se informaron los productos componentes del acuerdo.
El Gobierno autorizó una suba de las cuotas del servicio de medicina prepaga, del 13,8 % en diciembre. La vicepresidenta dijo que “resulta francamente inaceptable este nuevo aumento”.
Conflictividad social
Masiva inscripción al bono, medio millón en la primera jornada, y en los primeros 3 días supera l0s 800 mil otorgados. Las condiciones son por demás restrictivas:
- Tener entre 18 y 64 años de edad.
- No tener ningún trabajo registrado ni ingresos de ningún tipo.
- No ser titular de ninguna prestación social (jubilaciones, pensiones, Asignación Universal por Hijo, Asignación por Embarazo, Asignaciones Familiares, Progresar, Desempleo, Potenciar Trabajo, entre otras).
- No contar con una Obra Social o una prepaga.
El bono de emergencia que no puede cobrar casi nadie, como denuncian los piqueteros. Sus manifestaciones crecen en masividad ante una pobreza que aumenta sustantivamente. La concentración del ingreso persiste, la formalidad del trabajo se deteriora, el salario real cae, y aún más si se lo mide frente los precios de los alimentos.
Camioneros cerró la paritaria con un 107 % de aumento. Los trabajadores de ciertas actividades pueden preservar sus ingresos, mientras la mayoría sufre importante deterioro. Aumenta la desigualdad incluso entre trabajadores.
El ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro confirmó públicamente que Massa, junto a la vicepresidenta, evalúan el pago de una suma fija para trabajadores en relación de dependencia, de entre 20 y 40 mil pesos. Mientras tanto el presidente, pichuleando un mango, pidió a los ministros de Economía y de Trabajo que armen un bono, sólo para las fiestas.
Y la política
Se acercan las elecciones y ambos frentes, los que sostuvieron la disputa político electoral desde 2015, entran en inestabilidad. Habrá que barajar y dar de nuevo. Incluso reaparecen quienes apuestan a la “ancha vía del medio”.
La oposición está inmersa en una profunda interna, por un lado por las innumerables candidaturas presidenciales del PRO, y por el otro un aliado hasta ahora subordinado que pretende dejar de serlo. Inestabilidad en la alianza de nombre cambiante.
La coalición reaccionaria no pudo sostener una posición única en la votación del presupuesto, Para todos los gustos, algunos acompañaron al oficialismo, otros se abstuvieron y los demás votaron en contra.
El oficialismo también tiene sus internas, aunque todavía más ligadas a las políticas de la gestión. Más mercado o más política social tienen expresión tanto en la gestión como en las candidaturas. Massa y su política “market frendly” expresa una opción, que depende básicamente de su éxito en la gestión; por otro lado va la política que reclama mayor inclusión social, que se expresa en el creciente clamor porque Cristina sea la candidata.
A comienzos de octubre, la Vice había tuiteado “las empresas alimentarias han aumentado muy fuerte sus márgenes de rentabilidad”. Y agregaba “es necesaria una política de intervención más precisa y efectiva en el sector y, al mismo tiempo, diseñar un instrumento que refuerce la seguridad alimentaria en materia de indigencia”. A comienzos de la semana reclamó expresamente contra la autorización del aumento de las prepagas.
Cuando se aprobó el “contravalor”, el dólar soja a $ 200, ella impuso como contraparte que se distribuya una “prestación monetaria extraordinaria no contributiva y de alcance nacional que asegure una adecuada alimentación para las personas en situación de extrema vulnerabilidad”, que recién en esta semana se empezó a implementar.
En el centro político aparecen el peronismo cavallista de Córdoba, emparentado con la patria sojera, queriendo sumar a peronismos provinciales similares e incluso se los menciona como una tercera alianza junto con un sector del radicalismo.
La élite empresarial, el círculo rojo en palabras de Macri, ha sido desde su constitución apoyatura de la alianza conservadora. Durante la presente gestión ha jugado un rol persistentemente desestabilizador. La derecha acompaña con una política de brutal confrontación, de profundización de la grita. Incluso razonablemente se los acusa del atentado contra la lideresa.
Sazonando la problemática aparece un cambio en el empresariado, o parte de él. Paolo Rocca, de Techint, un capo del empresariado, acaba de sostener que la grieta genera una inestabilidad que es contraria a un buen clima de negocios. No está claro a quien apoyará, pero si a quien no.
A modo de conclusión
Cristina reclama por la mala gestión en cuanto a precios, que causó una importante disminución de los recursos reales de la mayoría, sean salarios, jubilaciones o ingresos de la “economía popular”. Marca su distanciamiento del presidente.
Las diferencias de concepción entre Cristina y Massa siempre se supieron, la novedad es que se hacen explicitas, particularmente ante la mencionada falta de resultados del ministro. Es clara su desaprobación de la inefectiva política de precios que hace más desigual la distribución.
Aunque la lapicera la tiene Alberto, y Massa tenga los resortes económicos, la referente política es Cristina. Ante el acercamiento de las elecciones el conflicto en el oficialismo parece difícil de evitar.
Columnista invitado
Hugo Castro Pueyrredón
Licenciado en Economía en la Universidad de Buenos Aires (UBA) en 1993. Trabaja en la Cámara de Diputados del Congreso de la Nación desde 2004 como asesor en temas económicos del Frente de Todos. Especializado en el rol del Estado en la economía, finanzas públicas y análisis presupuestario. Participa en la evaluación de diversos proyectos de inversión. Además, ejerce la docencia universitaria en la UBA desde los años ’90.