No podemos dejar que tres miserables nos pasen por encima e impongan candidatos anti pueblo y anti Argentina, pisoteando la constitución de cada Estado, el derecho y la justicia, con el apoyo de la mafia y el virrey.
Decía ayer; el pueblo debe tomar la justicia en sus manos. Tribunales populares, hasta que se normalice la justicia, expulsando a la “famiglia giudiciale”. Mientras los jueces justos y legítimos hacen justicia, en defensa del derecho y la constitución, ésta debe volver a los principios de la del ’49, con la actualización correspondiente.
Se debe consignar, allí, que los jueces deben surgir de elecciones libres, secretas , obligatorias y periódicas. Deben actuar y estar a derecho -siempre-, abonando los tributos correspondientes, como el resto de la población y sin privilegios de naturaleza alguna. Ni la CSJN -ni tribunal de cualquier tipo-, tendrán el manejo de fondos en forma reservada y sin rendir cuentas, ni ser auditado.
La Obra Social -a su vez-, debe tener control absoluto de sus afiliados -que formarán parte de su Consejo de Administración-. Como toda entidad afín, deberá rendir cuentas -regularmente-, a la Inspección General de Justicia de la Nación. Así -y solo así-, la Justicia podrá brindar sus servicios -al pueblo, en su conjunto-, no como legisladora, sino en cumplimiento de lo dispuesto por el Parlamento Nacional.
El gran delincuente Horacio Rosatti con el acompañamiento de una corte corrupta e ilegítima, no puede continuar siendo -presidente de facto de la corte, del consejo de la magistratura y de la nación-, en tanto, el presidente en ejercicio, no ejerce y permite tomar iniciativas sin consenso, ni control -a quienes son sus delegados y no tienen facultad orgánica alguna-, en virtud de no desempeñar cargos electivos.
Todo este panorama real, en que transcurren nuestras vidas, nos obliga a tomar ya, una determinación de hombres libres y soberanos, dentro de la propia ley. Cristina debe ser habilitada y votada por el pueblo; por falta total de causas y pruebas. No debemos aceptar que un reducido grupo de mafiosos, en nombre de la violación de las leyes, elija President@, o -lo que es lo mismo- , establezca quien pueda ser candidat@ y quien no, haciendo añicos el sistema democrático y -reitero-, la soberanía del pueblo, para elegir sus representantes.
La maniobra y la operatoria, para entregar la República a quienes han ejecutado actividades antiargentinas -siempre-, no debe permitirse -a como de lugar-, porque están en juego nuestra libertad y nuestras vidas. La asociación ilícita extranjera, no debe apoderarse -una vez mas-, de la Argentina.
Debemos exigir también -a como de lugar-, como en el caso anterior, que en todas las provincias y municipios sea el pueblo quien elija a sus candidatos. El pueblo y solo el pueblo, tiene derecho a votar a quien considere mas apto y las veces que lo crea pertinente. Figura en las constituciones provinciales y es la base mas auténtica del federalismo.
La nueva Constitución Nacional deberá -asimismo-, aprobar tal sistema, para asegurar la revolución que resulta menester (sin sangre, en ese caso), truncada en 1955 y en el 2015 (en ambos casos por golpes de estado, armado el primero y fraudulento, el último). QUIERA EL PUEBLO VOTAR, SEPA EL PUEBLO VOTAR Y QUE SE CUMPLA SU MANDATO (“VOX POPULI, VOX DEI”).
6 de junio de 2023
Columnista invitado
Carlos Valle
Docente, economista, historiador, periodista y escritor. Enlace de la Resistencia (1956). Presidente de la Asociación de Periodistas Latinoamericanos (1965-1976). Decano de los periodistas de Radio Nacional. Sindicalista y asesor gremial y político (CGT hasta 1991). Exiliado en 1962.