“Todo es intencional
“Los discursos y la criminalización en torno a los incendios en el sur
“Nuevo tipo social peligroso: el brigadista voluntario
“Alberto Weretilneck, gobernador de Río Negro, asumió un rol protagónico en la pacificación violenta de los territorios alcanzados por los incendios que siguen activos en la cordillera, después de que su par de Chubut, Ignacio Torres, mostrara toda la intención y el respaldo de la ministra Patricia Bullrich, pero menos capacidad de conducir la crisis que desató el fuego. Se muestran juntos, mientras los intendentes se pliegan livianamente al discurso del “terrorismo” detrás de los siniestros.
“El ejecutor material de esa estrategia es el Poder Judicial local, que mantendrá en prisión preventiva por un mes a un trabajador de la construcción de 31 años, de Senillosa (Neuquén), por ser sospechoso de intentar prender un fuego en la zona de la confluencia de los ríos Azul y Blanco. El hombre estaba alojado en un camping de Bolsón y se sumó al combate del siniestro como voluntario. El operativo policial de su detención y el despliegue de prensa lo hicieron aparecer como supuesto autor material del incendio de origen, no de una tentativa frustrada, que deberá probarse. En tanto el gobierno gana tiempo, el incendio sigue en dirección a los refugios de alta montaña.
“El viernes 7 de febrero se realizó la audiencia de formulación de cargos, durante la que el imputado brindó un claro y sencillo testimonio con su versión de los hechos y el defensor oficial Nelson Vigueras desmenuzó los elementos que permiten interpretar la maniobra del Ministerio Público Fiscal. De todos modos, la argumentación criminalizadora de la Fiscalía obtuvo el aval de Ricardo Calcagno, juez de Garantías de la Circunscripción Bariloche, que se excedió en su función, de acuerdo con el análisis de algunxs profesionales. Logrado el impacto inicial de la imputación con prisión preventiva por un mes, poco importa que este legajo quede en nada durante la investigación. El tono de la argumentación y la precariedad de la prueba tal vez se repita con otras dos mujeres también detenidas la última semana en un procedimiento posterior.
“A pesar de la fuerte presión criminalizadora y de confrontación con los equipos estatales de combate contra incendios, vecinxs del lugar reafirmaron su decisión de fortalecer las brigadas voluntarias en la lucha contra el fuego y en la defensa de las vidas en el territorio, con pronunciamientos públicos y medidas tanto en El Bolsón como en Bariloche.
“Semana ardiente
“Cuando el fuego se alejó de la zona poblada de El Bolsón y la ruta nacional 40, el miércoles 5 de febrero el poder local dio su golpe: a la mañana detuvo a tres supuestos sospechosos de provocar el incendio que le costó la vida a Angel Reyes (84 años), consumió la vivienda de al menos 150 familias en parajes rurales y 3.500 hectáreas por ahora; a la tarde, reapareció la patota gaucha que atacó a unos sesenta manifestantes que reclamaban por los detenidos en la comisaría local, ante la pasividad de los efectivos policiales que los dejó como rehenes durante varias horas.
“Así, la atención y la tensión la acapara el Poder Judicial con detenciones y allanamientos, mientras hacia la cordillera de los Andes el fuego consume invalorables bienes de la naturaleza y espacio de vida humana, desde la zona del lago Tromen (al norte, en Neuquén) hasta el área rural de Río Pico (al sur, Chubut), una franja de poco más de 500 kilómetros en línea recta. En el norte, el incendio en el Parque Nacional Lanín devoró toda la tierra de pastoreo de verano de la comunidad mapuche Linares, que debió evacuar todos sus animales. En Epuyén, se perdió un bosque de lengas y alerces milenarios, se afectó un glaciar y el calor sigue dañando suelos, raíces y evaporando humedad. Esta última semana se inició otro foco en el noroeste de Chubut, entre las localidades de El Hoyo y Epuyén, que afecta directamente al territorio de la comunidad Quilodrán, que mantuvo un duro y largo conflicto por años.
“Las poblaciones continúan en shock, tratando de reacomodarse en medio del trauma colectivo, tomando decisiones sobre sus vidas en espacios que llevará años recuperar.
“En ese contexto, Weretilneck y Torres desataron la cacería de los supuestos incendiarios, para lo cual Bullrich ya había prorrogado la vigencia del Comando Unificado Esquel-Rawson recientemente. El Comando Unificado de Villa Mascardi nunca fue totalmente desactivado. Desde la prensa afín y las redes sociales, operadores del gobierno incentivan la delación entre vecinos, escrutando y pidiendo los cientos de grabaciones que la gente hizo y subió a redes para dar testimonio de la batalla cotidiana de la lucha contra el fuego, de la solidaridad y la resistencia. La autocensura es una opción que se propició en las últimas horas ante el miedo por el escrache irresponsable o directamente malintencionado. Tampoco se descarta la acción de justicieros por mano propia, por lo que se pidió preservar la identidad del muchacho detenido y del lugar donde se alojaba en El Bolsón.
“El hombre que participó del combate contra el fuego en forma voluntaria quedó comprometido en una causa penal, en tanto que otros dos fueron liberados en 24 horas. Un derrotero parecido se anticipa para las dos mujeres detenidas en El Hoyo con prisión preventiva en Bariloche.
“Los operativos sirvieron para ahondar el dolor y la desconfianza por parte de la población que ya está muy golpeada no sólo por los últimos incendios, sino por los crímenes de Rafael Nahuel, Santiago Maldonado (2017) y Elías Garay (2021), los desalojos y el avance de distintas formas del modelo neo-extractivista.
“El jueves a la mañana la Policía detuvo a un hombre mapuche que vive en el área rural de El Bolsón, procedimiento convenientemente documentado para la prensa. Hace unos días, Torres incriminó sin ninguna prueba a un integrante de la comunidad Nahuelpán como supuesto incendiario del foco de Epuyén, cuando el hombre sufrió severas quemaduras, combatiendo el fuego dentro de su propio territorio, cien kilómetros más al sur.
“Los hechos y los discursos caminan por la cornisa.
“Intenciones
“La hipótesis del incendio intencional sirve desde el poder para tapar la ausencia total del Estado en la planificación y la infraestructura en el desarrollo, así como la falta de respuesta institucional a cualquier emergencia, como surge de mirar en retrospectiva las experiencias de los incendios de por lo menos la última década en la misma zona. También sirve para alimentar la militarización de territorios en conflicto y sofocar las iniciativas autónomas de la sociedad. La cacería de presuntos incendiarios no es nueva, pero ahora existen condiciones políticas e institucionales que profundizan la criminalización de cualquier disidencia. Además, el poder pelea el monopolio del uso de la palabra intencional y hegemoniza su sentido en la persecución de los presuntos autores materiales de los incendios.
“En la comarca andina del paralelo 42 (El Bolsón, El Hoyo, Puelo y Epuyén), desde hace varios años hay un cuestionamiento de base a la intervención estatal en el combate contra el fuego. Por eso, en numerosas ocasiones los pobladores afectados organizan brigadas propias. Algunas se han fortalecido y se mantienen temporada a temporada. Esa informalidad ahora está sirviendo para perseguir a sospechosos con elementos combustibles en su poder, como se argumentó al momento de detener a los tres hombres el miércoles pasado. En zona rural, toda vivienda tiene combustible en bidones para diferentes usos.
“El jueves, seis mujeres de El Hoyo (Chubut) fueron detenidas por haber sido vistas durante los incendios en Mallín Ahogado (Río Negro), lo que fue ratificado por ellas, ya que fueron como voluntarias a sofocar el siniestro. Cuatro de ellas declararon y fueron liberadas inmediatamente. Dos quedaron detenidas vinculadas a la investigación penal, según informó el gobierno actuando como vocero del Poder Judicial. Ambas fueron trasladadas a Bariloche hasta que se realice la audiencia de formulación de cargo y se resuelva su situación procesal.
“La solidaridad como delito o, por lo menos, como acción sospechosa suficiente para un allanamiento y demora en comisaría. La desmovilización del voluntariado también es un objetivo. En definitiva, quebrar los lazos solidarios activos en el territorio. Con mesura, ya hay réplicas desde la base social.
“Gran desierto ardiente
“Patagonia en llamas es una síntesis fuerte para llamar la atención. Permanecen cinco puntos con incendios activos, distantes en kilómetros unos de otros, con actores sociales diferentes en sus intereses, sus trayectorias y su inserción comunitaria. En principio, es muy diferente el daño y las consecuencias de los incendios dentro de los parques nacionales (Bariloche y Lanín), que en las áreas urbanas semirrurales en Epuyén (Chubut) y Mallín Ahogado (paraje de El Bolsón) o los campos de estepa (Madryn). Diferente también es el combustible del fuego, si se trata de plantaciones exóticas, bosque nativo o arbustos bajos.
“Al cierre de esta nota, continuaban activos los siguientes incendios:
“Los Manzanos y valle del río Manso medio, dentro del Parque Nacional Nahuel Huapi, al sur de Bariloche. Se inició el 25 de diciembre y lleva consumidas más de 10.000 hectáreas de bosque nativo.
“En La Batea, junto al río Encuentro, cercano a la comuna Atilio Viglione, cordillera de Chubut. Se desató el 19 de enero y lleva consumidas 3.800 hectáreas de bosque nativo.
“Valle Magdalena, en el Parque Nacional Lanín, cerca de la localidad de Junín de los Andes, Neuquén. Se inició el 30 de enero y lleva consumidas 5.000 hectáreas de bosque nativo.
“Confluencia de los ríos Azul y Blanco, en el acceso al área natural protegida río Azul (Anprale), El Bolsón. Se inició el 31 de enero, consumiendo al menos 3.000 hectáreas de espacio productivo, forestación exótica y bosque nativo.
“-Cuenca del arroyo Pedregoso, área rural cercana a la localidad de El Hoyo, Chubut. Cinco focos iniciados la madrugada del 5 de febrero. Lleva consumidas 40 hectáreas de forestación con vegetación exótica y bosque nativo.
“Poblaciones enteras directa e indirectamente afectadas en esas hectáreas.
“Malaya
“A las diez de la mañana del miércoles 5, más o menos, se conoció que habían llevado detenidos a los tres brigadistas que habían participado en el combate del incendio en Confluencia, Loma del Medio y reserva Guadal. Lxs vecinxs se autoconvocaron en la Comisaría 12 del centro de El Bolsón a reclamar por ellos pasado el mediodía. No hubo ninguna información oficial sobre ellos: ni cuántos eran, ni las razones, ni el lugar de detención. La gente estaba dentro de la vieja comisaría y en el jardín, buscando algo de fresco. Llegó un hombre montando un caballo oscuro, brioso, con rebenque en la mano. Victor Hugo Aranea, empleado público, figura visible de la “patota gaucha”, fuerza de choque que actúa a cara descubierta cuando hay reclamo en la calle, por lo menos desde la tarde que dos sicarios asesinaron a Elías Garay en Cuesta del Ternero y otro joven luchaba por su vida en el hospital local, el 21 de noviembre de 2021.
“Llegaron más vecinxs, convencidos de que habían aprehendido a los incendiarios. Estaban de espectadores, enfrente de la comisaría, en la calle Araneda, y los jinetes llegaron de a poco, con el correr del tiempo, hasta ser una docena, según los videos grabados por los asistentes. La patota actuó a cara descubierta, golpeando con palos —algunos con clavos en las puntas— y rebenque, amenazantes con el cuerpo de los caballos. Eran unos sesenta lxs vecinxs atrapados entre la patota y la policía local, que no actuaba, que simplemente ponía sus escudos a la altura del pecho de los caballos. Después se acercaron unas camionetas con personas con equipos de comunicación tipo handy, aumentando el nivel de agresión y violencia.
“En el tumulto, alguien reconoció a Araneda y lo dijo a viva voz: “Es el que le pegó a Yuyo”. Él lo confirmó, también a los gritos, detalló una mujer que presenció el momento.
“Hace un año, el 18 de enero de 2024, por la noche, Araneda fue hasta el domicilio familiar de Raúl Brigues, Yuyo. Hacía cuatro días que había finalizado una marcha por el libre acceso al lago Escondido. Lo insultó, amenazó y golpeó, fracturándole la nariz y una rodilla, provocándole una lesión irreversible. A los gritos lo acusó de ser quien lo señala como parte de la patota que bloquea el acceso público Tacuifì en favor del magnate británico. La víctima es prestador de servicios turísticos del paraje El Foyel y anfitrión del encuentro cultural por la soberanía del lago Escondido, que se realiza desde hace cinco años en su viejo almacén.
“La Justicia local dispuso una restricción perimetral para el agresor. Para el 14 de febrero está prevista una audiencia, ya que vence el plazo de investigación por los hechos que se le imputaron en octubre, en audiencia pública.
“Es también parte del grupo que atacó a marchantes por el libre acceso al lago Escondido, causa judicial que está demorada. Otrxs vecinxs le atribuyen otros hechos de violencia, por lo que su presencia genera temor e inseguridad. Ahora, Bringues confirmó la identidad de su agresor en los videos que circulan del grupo de jinetes frente a la comisaría de El Bolsón.
“El miércoles, dos hombres mayores sufrieron caídas, una mujer se esguinzó un tobillo y otra recibió un severo corte en la cabeza, entre otras personas que sufrieron la persecución. Unas seis horas estuvieron prácticamente cautivos. Un grupo de referentes de organizaciones mapuche, sociales y políticas presentó un recurso en la Fiscalía en Viedma, ya que fue imposible hacerlo ante ninguna oficina judicial en El Bolsón por esas horas de incertidumbre. Por su parte, la APDH Bariloche también repudió la inacción policial ante la acción de la patota gaucha, así como su par del noroeste del Chubut.
“Al día siguiente, al menos cuatro jinetes obstaculizaron el despegue de una nave afectada al operativo del combate con incendios en el aeródromo local, como documentó uno de los tripulantes.
“Nunca, en todos estos años, nadie del gobierno municipal ni provincial expresó nada respecto a esta banda que actúa a plena luz del día y a cara descubierta. Tampoco se conoce ninguna investigación judicial.
“Otro perfil
“Hasta ahora, el gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa (partido Comunidad, alianza local), despliega una estrategia diferente ante los incendios, en apariencia autónoma respecto al proyecto Bullrich de “terrorismo mapuche” como fuente de intencionalidad. En esta provincia, los reclamos parecen más apegados a la experiencia directa, por la falta de recursos o la elección del destino de los recursos que existen.
“El incendio del valle Magdalena se produce dentro de la jurisdicción del Parque Nacional Lanín, muy cerca del límite internacional con Chile y a unos 65 kilómetros de Junín de los Andes, la ciudad más cercana. Hasta ahora lleva consumidas cinco mil hectáreas de pastizales, arbustos y bosque nativo. De esa superficie, unas 2.300 corresponden al espacio de veranada (uso en verano) de la comunidad mapuche Linares, que tuvo que evacuarse junto con sus animales a unos potreros cercanos. Otro sector de veranada que corre riesgo es Huaca Mamuil, de 450 hectáreas, según precisiones aportadas por gente que trabaja en la zona.
“Este panorama es provisorio, como los relevamientos oficiales de pérdidas. En el listado de pérdidas que no falte la libertad de un obrero de la construcción de 31 años, preso político por ser brigadista voluntario.
“Elcohetealaluna.com
“Susana Lara
“9 de febrero de 2025”.


