Los glaciares de nuestra cordillera están en peligro de desaparecer y con su desaparición los mendocinos tendremos que emigrar. Así de simple. Sin glaciares no hay agua y sin agua no hay vida en zonas áridas como Mendoza.
Un grupo de científicos del CONICET, del IANIGLA y de la Universidad de Toulouse, llevaron a cabo un estudio en el cual se compararon 30.000 imágenes satelitales de los glaciares de la cordillera de los Andes tomadas entre 2002 y 2018 y descubrieron la gran pérdida de masa de los glaciares en la región central o sea la de Mendoza y San Juan.
Las proyecciones futuras de los científicos son que, en el mejor de los escenarios, para el final del siglo se habría producido una pérdida del 30 % del volumen actual de los glaciares y en el peor de los escenarios, desaparecería el 70 % de su volumen actual.
Y mientras esta realidad golpea las puertas de todos los mendocinos, el Gobernador Suarez junto al Director de la Dirección General de Escuelas, José Thomas, intentan modificar las políticas educativas de nuestra provincia capacitando a docentes en la actividad minera, para que ellos luego la impartan a los alumnos.
O sea que les inculcarán a nuestros niños y adolescentes las bondades de usar en la minería la poca agua que nos queda; les inculcarán las ventajas de contaminarnos con cianuro y les inculcarán los beneficios de transformar nuestras montañas en cráteres y esto, por una solicitud expresa de la Cámara de Empresarios Mineros y de la Asociación de Industriales Metalurgicos (ASINMET).
Nos preguntamos: ¿cuáles son las razones que los empresarios mineros y metalúrgicos pueden tener para seguir insistiendo por todas las vías, con sacar el oro de nuestras montañas?
Si es cierto que les preocupa la situación económica de Mendoza, ¿porqué no desarrollan la metalmecánica y la vuelven al sitial que tenía en los años´60?. Porqué no demuestran su inteligencia como empresarios e inventan máquinas para el mercado interno y para exportar, tal como hacen las PYMES de Italia, por ejemplo?
Ambos conjuntos, empresarios mineros y empresarios metalúrgicos, saben muy bien los daños que nos producirá la extracción del oro de nuestras montañas, pero hacen como que no lo saben y siguen con la musiquita de los puestos de trabajo y del cambio de la matriz productiva, contando con funcionarios dúctiles, que al igual que ellos algunos beneficios tendrán, pero atentando contra la sociedad que los puso a gobernarnos, la misma sociedad que no aprueba cambiar chafalonías por agua y por vida.
Columnista invitado
Alberto Lucero
Ingeniero Electricista, Universidad Tecnológica Nacional, Facultad Regional Mendoza. Titular de “LENIX Publicidad”. Titular de “INFO POINT SYSTEM”. Co-fundador de las A.M.P.A.P. (Asambleas Mendocinas por el Agua Pura), en Tunuyán.