En primer lugar quiero referirme a todas las viviendas que hay desocupadas en nuestra provincia, por muy distintos motivos. Me parece que en ese sentido habría que generar un instrumento que beneficie de alguna manera a los titulares de las mismas, para que rápidamente las pongan en alquiler, puesto que más de la mitad de nuestra población forma parte de ese universo de pendencias. Por otra parte me gustaría que eleváramos la mira acerca de la calidad.
Recuerdo como si fuera hoy a ese funcionario que dio a entender que eran demasiado buenos los departamentos del conglomerado que se halla en Suipacha y Tiburcio Benegas, de Capital. Luego se tomaron su tiempo para entregar cada unidad y se dice que hijos de personas con poder relativo dentro del oficialismo local, tuvieron la posibilidad de “quedarse” con algunos de ellos. El funcionario que decía que eran demasiado buenos, partía de la premisa que los pobres no deben vivir bien.
Como uno de los precandidatos a la gobernación fue titular del Instituto Provincial de la Vivienda -me refiero a Omar Parisi, en el Frente Elegí- el tema ha trepado a la visibilidad pública a partir de sus promesas de campaña. Luego, todas las fuerzas se han sumado a ese abordaje y el debate se pone interesante. La experiencia de la Túpac Amaru hay que tenerla muy en cuenta, puesto que Milagro Sala dio cátedra en la construcción de viviendas a precios lógicos y sustentables para el Estado.
“Paso 2023
“Qué hay detrás de las promesas de construir casas, uno de los ejes de campaña en las elecciones de Mendoza
“Es una de las propuestas que más se repiten en la previa de las PASO. De qué manera afirman los candidatos que van a combatir una problemática que lleva décadas y afecta a cada vez más gente. Números, ideas y lo que no se ve a simple vista, tras la esperanza del techo propio
“Para los próximos años, la provincia tiene el desafío de ayudar a más de 100 mil mendocinos a conseguir su hogar.
““Llega Parisi, llega tu casa”, rezan los banners que saltan a los ojos del lector en los portales de noticias. El precandidato peronista prometió entregar 16 mil viviendas y es el eje de su campaña política, pero no es el único que lo puso sobre la mesa: Guillermo Carmona, Omar De Marchi y Mario Vadillo, entre otros, también hablaron del tema en esta semana. El Gobierno no sólo respondió, sino que prepara sus propios datos para repeler ciertos ataques. ¿Qué números y datos reales se esconden detrás de las promesas? Detalles, cifras y comparaciones para entender una problemática que cada año se agrava más y le complica la vida a más de un millón de mendocinos.
“Una de las primeras preguntas que hay que hacerse es cuánto sale construir una casa para el IPV. O, concretamente: cuánto sale cada una de esas propiedades que están prometiendo edificar en Mendoza y que deberían entregarse antes de 2028. Dato central, porque permite saber con qué fondos tendría que afrontar la provincia el cumplimiento de dichos compromisos. Y sobre todo, entender si sería viable en el contexto económico que asoma en la Argentina.
“Si se utilizan como parámetro los montos promedio del Instituto de la Vivienda, cada casa que se construye cuesta más de de 15 millones de pesos. Eso significa, por ejemplo, que para el plan que Omar Parisi instaló en el corazón de la campaña, harían falta casi 240 mil millones de pesos. Es el costo, bajo esos números, de las 16 mil unidades de las que está hablando.
“Es decir, prácticamente ocho veces el presupuesto del IPV para todo un año, si se toman los 34 mil millones presupuestados para el ejercicio 2023, que de todos modos ya está presto a recibir refuerzos presupuestarios. También es equiparable, a dólar oficial -que permite una cuenta simple porque justamente está en cerca de 240 pesos por dólar- a mil millones de dólares. Un Portezuelo del Viento o un poco más que una central hidroeléctrica y media como la que Rodolfo Suarez quiere hacer con El Baqueano.
“¿Se puede prometer algo en esos valores? De manera poco sorpresiva, el Gobierno dice que no y Parisi dice que sí. En principio, al oficialismo la cifra le parece irrisoria, según comentaron desde dentro del propio IPV. Pero además agregaron que los 15 millones por unidad empezaron a quedarse cortos este año. Con lo cual, el monto de hacer esa cantidad de viviendas sería incluso mayor. “Las que hacemos rondan todas los 17 millones de pesos”, contó la titular de esa entidad, María Marta Ontanilla, a este diario. Todo el debate se puede profundizar.
“Los números detrás de las 16 mil nuevas casas
“Diario UNO consultó al propio precandidato sobre las cuentas que él mismo y su equipo hacían. Y el ex intendente de Luján se mantuvo firme en su propuesta, aunque explicó que está concebida en torno a valores más bajos y argumentó por qué: “Cuando hablan de casas de 15 millones, me hace ruido, porque no sabemos de qué estamos hablando. Nosotros tenemos el metro cuadrado calculado entre $203 mil y $250 mil. Entonces es esa la cifra que hay que tomar, y no otra, teniendo en cuenta que una casa promedio del IPV va de los 55 m2 a los 70 m2”, contó el precandidato.
“De esa manera, entonces, su promesa integral asciende a un monto que oscila entre los $178.640.000.000 y los $220.000.000.000; con propiedades que costarían de 11 a 23 millones de pesos cada una. Antes de avanzar, debe aclararse que esos costos no serían constantes, porque están elaborados bajo el panorama económico del 2023, y no se sabe cómo podrían evolucionar en los cuatro años en los que deberían edificarse esos nuevos hogares.
“¿Cómo empezar a chequear la validez de todos esos números? En principio, las cifras que brindó el peronismo coinciden con las que llegaron a este diario desde el Centro de Ingenieros de Mendoza. Desde enero de 2017, esa institución realiza seguimientos mensuales para ponerle la lupa a cómo -y cuánto- evolucionan los materiales de la construcción, la mano de obra y cada una de esas realizaciones en general. En su último relevamiento, explicaron que el metro cuadrado está en $ 243.187. O sea, en el rango que brindó Parisi y que también validaron desde el propio IPV.
“En el medio, un dato no menor: según ellos mismos, el precio actual es el más alto –si se lo mide en dólares oficiales- desde que confeccionan estos índices. Es decir, todo es más caro ahora que en cualquier momento de los últimos seis años. Asimismo, según fuentes del Instituto Provincial de la Vivienda, todas las unidades que fueron entregadas en el último tiempo son de 60 m2 y nunca menores a eso, incluso las más pequeñas.
“Pero el análisis no puede agotarse en la extensión. La calidad de las terminaciones es otro de los aspectos que también discutió el ex intendente: “Cuando llegué al Instituto, las entregaban sin pintura, sin bidet y sin mesada a las casas”. La crítica fue a los funcionarios que hubo en los tiempos de Celso Jaque. “Nosotros les agregábamos el baño, azulejos, todo. Y hoy, a varias de las casas que entregan, las entregan así también. En cuanto a los valores, hay diferencias notables si, por ejemplo, pones techos de chapa o de otra calidad. O la carpintería que uses, etcétera. Son varios los factores que intervienen”, puntualizó.
“La deuda que le reclaman desde el oficialismo
“Antes de adentrarse en otras propuestas que también empezaron a recorrer la política esta semana, debe destacarse que el oficialismo salió a responderle puntualmente a Parisi. No sólo porque fue él mismo el titular del IPV durante la última gestión peronista de Mendoza, sino porque pudieron tomar su propuesta para reclamarle por la deuda de casi 500 millones de pesos que dejó con empresas constructoras. Fue sobre el final de su paso por la entidad y tuvo que ver con la falta de financiamiento que cercó a la provincia en aquellos últimos meses de Francisco “Paco” Pérez en el poder. Allá por 2015.
““Dos presupuestos fue la deuda que nos dejaron de perno. Y que repercutió de lleno, obviamente, en la cantidad de casas que pudimos hacer durante el primer año de gestión”. Quien habla fue funcionario del IPV en el gobierno de Alfredo Cornejo, pero prefirió mantenerse en off. “Eso por un lado. Después hay que salir a ver a cuánta gente metieron al estado al mismo tiempo, cuando no pagaban, pero seguían incorporando empleados al IPV”, marcaron.
““No sólo era lo que no se pagaba, sino que las obras se paralizaron. Seis meses les debían. Y por eso sacaron un decreto que les impedía a esos acreedores hacer más del 1%, para no generar gastos improductivos y para no morfarse una denuncia”, continuaron funcionarios que vivieron la época 2016-2019 desde adentro.
“Pero el aludido respondió: “Si, fue cercana a los 500 millones la deuda, es verdad. Pero seguí haciendo construir a las empresas sólo con los fondos nacionales. En esa época, la financiación era del 60% fondos nacionales y 40% con fondos locales. Pagando lo que venía desde Buenos Aires, las firmas siguieron trabajando y, con mucho esfuerzo, logramos que jamás abandonaran las obras. Eso redundó en que muchas personas pudieron, incluso en un muy mal contexto, poder acceder a su casa. Ahora, debe quedar algo claro: no era deuda de salarios, ni de combustible, ni nada de gasto corriente”, puntualizó Parisi.
“Finalmente, como se sabe, el radicalismo emitió un bono con el que comenzó a sanear parte de esas acreencias y terminó pagando a los privados: 52 firmas distintas, según supo este diario. Lo que no pudo evitar fue que el saldo en casas entregadas, en aquel primer año de Cambia Mendoza, fuera negativo. Al menos si se lo compara con períodos anteriores y posteriores, fue el peor en las últimas dos décadas. Lo corrigió en los tres ciclos subsiguientes, en los que entregó 5.877 viviendas.
“Carmona: Un IPV “fortalecido” sistema de créditos on line
“Guillermo Carmona, precandidato a la gobernación de Avanzá Mendoza –otra de las listas del PJ- también sumó propuestas en torno al déficit habitacional de la provincia. En concreto, su oferta consiste en créditos hipotecarios; beneficios para quienes construyan de manera amigable con el medio ambiente; y una gestión en Buenos Aires para mejorar la indexación actual de los préstamos en UVA, que como es bien sabido terminaron en conflictos judiciales y en cuotas que los adjudicatarios califican de “impagables” –cuando no directamente de “pesadillezcas”-. Eso es al menos una parte de lo que puso sobre la mesa.
““Vamos a establecer créditos con tasas diferenciadas para jóvenes inquilinos y mujeres jefas de hogar, para que puedan llegar a su primera casa”, expresaron. A estos dos grupos les otorgarían tasas diferenciales que les permitirían poder solventarlo. Y hay un detalle clave: el dato en torno a las jefas de hogar toma otro volumen si se lo complementa con otro al que tuvo acceso UNO: de acuerdo al Registro Nacional de Barrios Populares, el 71,2% de las viviendas en ese tipo de barriadas (asentamientos, en muchos casos) tienen mujeres al frente. O sea, quienes paran la olla en 7 de cada 10 hogares de ese tipo que hay en Mendoza, son madres, tías, abuelas y hermanas. Y se cree que, sólo en la provincia, 24.408 mil familias viven en esas condiciones. Son todas cifras oficiales.
“Carmona y su equipo agregaron que a esa serie de ideas se sumaría un mecanismo completamente digital para gestionar las líneas de crédito. “Concretando en Mendoza la experiencia que Guillermo Carmona llevó adelante desde el Instituto de Ayuda Financiera del Ministerio de Defensa, única experiencia en el país de créditos personales e hipotecarios tramitados totalmente de manera remota”, apuntaron.
“El aspirante a la gobernación también habló de préstamos para la refacción de unidades, siempre pensando en articular con municipios para poder descentralizar un sistema al que critican por estar, supuestamente, centralizado. Además, como se dijo, habría beneficios para quienes emprendieran construcciones con métodos ecológicos y amigables con el medio ambiente.
“A propósito de los UVA –que el actual funcionario de Cancillería propone reconvertir a través de gestiones en la Nación-, por estos días hubo avances entre miembros del Banco Central –específicamente del equipo de Miguel Pesce- y diputados mendocinos. La idea es que la próxima semana pueda llamarse a una sesión en el Congreso que, de una vez por todas, trace una nueva manera de actualizar esos montos, pero todavía no hay acuerdo respecto a cómo podría hacerse ni a cuál será la postura de los bancos.
“Las propuestas de De Marchi
“El precandidato Omar De Marchi agitó el avispero a principios de año, cuando todavía era parte de Cambia Mendoza. El 11 de enero, en una entrevista con Radio Nihuil, dio uno de sus primeros golpes a la gestión Suarez en materia habitacional: dijo que el 2022 había sido uno de los peores años de la historia en cuanto a construcción de hogares. Ahora, ya como competidor declarado, mostró un plan que pone el foco en la mejora de condiciones, el acceso a materiales, y la regularización dominial, entre otros puntos.
““El plan debe enfocarse en la disminución del número de hogares con déficit cualitativo, que es mayor que el déficit cuantitativo”, afirmaron a Diario UNO. Así, graficaron que habría mejoramiento de viviendas que requieran refacciones y/o ampliaciones; incorporación de tecnología que mejore la eficiencia energética y el acceso a internet; y mecanismos para regularizar dominios; una necesidad de decenas de miles de personas en la provincia
“A eso se sumarían créditos para la compra de materiales de construcción. De acuerdo al Centro de Ingenieros de Mendoza y a su relevamiento mostrado más arriba, el costo interanual de la construcción se elevó un 7,26% en el último mes y un 117,9% interanual. Los materiales implican uno de los incrementos más pronunciados: 116% más que hace un año si se los mide en pesos y un 10,46% en dólares.
“Por último, marcaron que el IPV debe apalancar el financiamiento para viviendas sociales con todos los instrumentos de crédito que sea posible disponer. En ese sentido, mencionaron créditos hipotecarios, y apuntaron a una política que pueda mantenerlos estables a lo largo del tiempo. “Salir del esquema paternalista de intervención estatal”, resumieron.
“¿De qué se trata el “leasing inmobiliario” que propone el Partido Verde?
“En el panorama de propuestas, aparecieron las del precandidato Mario Vadillo. Su propuesta tiene que ver con tres ejes: un sistema de leasing inmobiliario; en el que los inquilinos paguen, parte de su vivienda para transformarse en dueños, al mismo tiempo que abonan alquileres; la creación de un nuevo organismo paralelo al IPV; y por último, la adjudicación de casas industrializadas de bajo costo.
““El leasing tiene innumerables ventajas: es la compra de una vivienda o de un auto que, mientras se paga, desgrava impuestos y va acumulando el monto total del capital. Está regulado por el nuevo Civil y para ello rigen todas las normas de un contrato de alquiler cualquiera: quien no paga puede ser desalojado. No se utilizaría para alquileres comunes, sino para viviendas sociales. En cuanto a los montos, serían más caros, por supuesto, pero también dependerían de cuánto pueda aportar el Estado en subsidios, explicó ante la consulta.
“En cuanto a los tipos de unidades, uno de los puntos sorpresivos en la plataforma de Vadillo es que habló de casas que costarían sólo 2 millones de pesos cada una. Se trata de construcciones hechas bajo una metodología llamada “wood framing”; con vigas y columnas de madera y paredes de durlock con distintos aislantes. Todo colocado sobre plataformas de cemento y en formatos pequeños de 35 m2, aproximadamente. Sin embargo, su bajo costo se explica no sólo en esas dimensiones, sino en que el adjudicatario, además, debería hacerse cargo de ponerle elementos de cocina, baño y cableado.
“Por último, lo que dijo el ex diputado por estos días es que debería crearse una Agencia Provincial Inmobiliaria. Una entidad distinta al Instituto de la Vivienda, y cuya estructura permitiría tener nuevos contratos con los beneficiarios: “El tema es que el IPV fue creado hace muchos años, pero estaba pensado para recibir aportes nacionales. Son estructuras viejas. Impiden tener este sistema de leasing inmobiliario que proponemos. Con otra constitución legal, se permitiría este sistema de alquileres que es clave para el acceso a la vivienda”, apuntó.
“Cuántas casas hizo cada uno
“En el último siglo, la gestión que más viviendas logró construir y entregar fue la de Julio Cobos, que llegó a las más de 10.500 unidades. El gobierno del actual diputado tuvo su pico en 2006, cuando otorgó 3.612 casas en un año, una cifra anual que nunca más fue superada, al menos según los datos oficiales del IPV.
“El titular del instituto en ese tiempo era Raúl Cicero, que ya venía trabajando en el final del gobierno de Roberto Iglesias y se terminó quedando a partir de 2003. UNO se comunicó con él para que brindase datos de esa tarea: “La descentralización fue una de las claves, sin dudas. Néstor Kirchner nos citó a todos los presidentes de institutos de vivienda del país. Fue en el edificio del Correo, donde ahora es el CCK. Decidió unificar los 18 programas que había en una única secretaría. Y eso ordenó la transferencia de recursos, que en un 30%, aproximadamente, eran nacionales”, respondió.
“La gestión de Jaque hizo 6.266 casas y la de Francisco Pérez, 5.901, con –precisamente- Parisi en la cúpula del IPV. Esa experiencia, dijo, es la que le permite hablar de un plan tan ambicioso como el de hacer 16 mil hogares. “En ese momento, fueron inversiones que rondaron los $ 1.271.513.410, y que a una cotización del dólar a cerca de $9, como estaba en aquel entonces el oficial, arroja 130.6 millones de dólares invertidos”, graficó.
“La vuelta del radicalismo, con Alfredo Cornejo en el poder, cerró con un número mayor al de sus antecesores, con 6.229 entregadas. Rodolfo Suarez, que está a siete meses de cerrar su ciclo como gobernador, afirmó en la apertura de sesiones ordinarias que su gestión ya terminó 7.200 casas entre las gestionadas por el IPV y por el programa Mendoza Activa. La oposición salió a refutar esos números, pero fueron ratificados ante la consulta de este diario por la actual titular del organismo, María Marta Ontanilla.
““Esa es la cifra de nuevas casas. Vamos a cerrar con una de las mejores gestiones. Además, tenemos 4.584 viviendas en obra y otras 2.577 licitadas para poder iniciar”, apuntó la funcionaria.
“En el medio, esta semana se conoció el primero de diez informes del INDEC sobre distintas condiciones de habitabilidad en el país. El relevamiento marcó que el 40% de las personas en la provincia no posee casa propia. De alguna manera, vino a ratificar que el déficit habitacional está lejos de resolverse, tal como se preveía de todos modos. Al día de hoy, en el propio Gobierno creen que hay entre 100 mil y 150 mil mendocinos que todavía están esperando una solución, y que, mientras tanto, lo resuelven con distintas medidas alternativas. Como pueden.
“Las perspectivas y los números fríos marcan que una gran cantidad de ellos deberá seguir esperando. Por eso es un tema central para la Mendoza de los próximos años.
“Diariouno.com.ar
“Julián Imazio
“21 de mayo de 2023”.