No correspondería nunca que nos cobren el agua ya que somos habitantes del planeta y se trata del líquido elemento, fundamental para la vida de todas las especies y, desde ya, para estas vulnerables criaturas que somos. Mucho menos cuando nos enteramos que ha avanzado el plan de privatización de semejante recurso vital. Como todo hay que medirlo con la vara del costo beneficio, según se maneja el neoliberalismo, así estamos. Ojo con estos monos con la “yilé” para el manejo del agua.
Suarez nos responsabiliza a los mendocinos y mendocinas por gastarla en demasía. Alguien tiene que tener la culpa entonces lo mejor en acusar a la masa de lo que está mal hecho por los funcionarios. Su predecesor, el Gobernador Alfredo Cornejo nos metió el fracking por decreto, porque no tuvo la valentía para dar el debate legislativo y a la vez para embretarnos con una forma de extracción de petróleo que va del saqueo a la contaminación. Para eso son buenos los macriradicales.
Ese instrumento insume millones de litros de agua pura por pozo, lo que es un verdadero despropósito. Estos luego son devueltos sin posibilidad de reinsertarlos al ciclo natural, puesto que se hallan contaminados por el coctail de sustancias que le suman al inyectarlos a miles de metros de profundidad. Las acequias son un tesoro vivo que mantiene la vida en este desierto y tampoco deben ser sacrificadas. Estos corruptos encima quieren cambiar parte de nuestra cultura. ¿Quién los para?
“Objetivo 2023
“El Gobierno acelera el plan para limitar el agua a la población y el arbolado con tarifas que penalicen el consumo “excesivo”
“Mientras el Gobierno entrega millones de litros de agua de los ríos a las petroleras para hacer fracking, Irrigación acelera el plan para cobrar por el agua cruda en tarifas para tal fin y castigar el “consumo excesivo” de los pobladores de a pie.
“Para hacerlo, Sergio Marinelli, el radical al frente del organismo, usará un plan de acción diseñado con la empresa israelí Mekorot, denunciada internacionalmente por consolidar en Palestina una especie de “apartheid del agua”.
“El plan de acción se enfocará en “la necesidad de medición, de que el precio de las tarifas de señales de la situación crítica generada por la sequía, la problemática del arbolado público, y del uso de aguas grises para el riego de jardines”.
“A fines de 2022, Marinelli se quejó en declaraciones públicas por el agua que pasa por las acequias para mantener el arbolado de Mendoza, además de acusar a la población de hacer un uso irracional del recurso. Y anticipó que prepara una ley para limitar el agua en puntos clave.
“Adelantó también que trabaja en la elaboración de un Código de Aguas, y de hecho el Gobierno planea una reforma de la centenaria Ley de Aguas en ese sentido.
“El ente autárquico es el responsable de otorgar agua de los ríos a las petroleras para que practiquen fracking, sin embargo ese tema no figura en la guía de trabajo que elaboró Marinelli.
“Entre los objetivos trazados figura avanzar en el primer trimestre de 2023 con convenios específicos para colocar medidores de agua para “incrementar o no el coeficiente de cobro del agua cruda”. El EPAS será el encargado de controlar dicho nivel de cumplimento.
“Marinelli blanqueó además la intención de cobrar por el agua y penalizar a la población que se exceda. Dice el plan: “Establecer criterios para la futura implementación de tarifación volumétrica que permita valorar económicamente el agua y castigar el consumo excesivo”.
“Y el punto 6 indica:
“”Evaluar proponer un proyecto de legislación mediante la cual los incrementos del agua cruda se puedan trasladar automáticamente a la tarifa”.
“Explicitoonline.com
“11 de enero de 2023”.


