Saber de antemano que la calle tiene sus propias reglas. Insistir en plantar arte en los espacios públicos. Salir con brochas, pinceles y pintura de colores, para llamar la atención de retinas de seres humanos que -quizás- fueron ganados por la rutina.
Cada vez que un mural es mirado nuevamente, pasa la prueba de ese efímero momento que es evidente comunión con lo artístico. Entonces qué importan vándalos y todos aquellos que puedan llegar a dañarlos.
Si se puede se restaura y sino, quedará alli tal cual como testigo de ese entrecruzamiento imposible. Cada mural nos entretiene, nos educa y señala temas que por ahí de otro modo no advertiríamos. Los murales hablan. Los artistas los hacen hablar.
“Me consolido como artista a partir de trabajar en obras murales. Abordo el muralismo como herramienta de comunicación, un arte al alcance de todos y todas. Las ideas transformadas en imágenes y con ellas la lucha como ejercicio de una identidad. Se transforman en patrimonio de los habitantes que transitan las calles. Cada mural, una historia, una lucha, un ejercicio plástico, un nuevo desafío”.
María Alejandra Famá
Egresada de: Escuela Nacional de Bellas Artes Manuel Belgrano y Escuela Prilidiano Pueyrredón, especialidad Pintura. Docente en Centros Culturales Barriales (CABA). Docente y Jefa de Carrera en IES N°7 Venado Tuerto. Obras en: Museo del Tren Blindado, Santa Clara, Cuba. Casa de la Memoria de Osvaldo Bayer, Frankfurt, Alemania. Mural en Pachuca, México. Obras murales en Venado Tuerto, Santa Fe y otras ciudades argentinas. Integra el Movimiento Internacional de Muralismo Italo Grassi, delegada por la provincia de Santa Fe.



Felicitaciones María Alejandra por tus murales,muy interesante tu trabajo