Después del hermoso tiempo en que Cultura de San Antonio Oeste estuvo bajo la dirección de Marcela Dodero y en Las Grutas a cargo de Mariela Andújar, comenzó la temporada cuando la policía golpeó salvajemente a Ciro, el que fue el excelente profe de clown. Le rompió una costilla delante de la feria artesanal. Después, con la pandemia y la cuarentena obligatoria, el año pasado hubo turismo, pero no se permitió acampantes. Entonces los campings quedaron sin riego y ahora se están vendiendo, en el proceso que ya se había iniciado antes. Se vendieron los de las mutuales sindicales. En el de la mutual de Gas del Estado se construyó el shopping «Puertas al sol»; en el de la mutual de los ferroviarios, el shopping «Las olas», en el de Vialidad, «Las Torres», un hermoso pulmón verde. Ya hay cartel de SE VENDE en otros campings: en el de la avenida Río Negro entre Pichimahuida y Sierra Grande y en el de Legisladores. Los campings son el indispensable pulmón verde para la localidad. Además han sido construidos con el aporte de los integrantes de dichas mutuales durante años. En la reunión por zoom con el secretario de Medio Ambiente y las Juntas Vecinales, le pregunté por este tema y me dijo que no era de su ámbito, que estaban acordando los campings con Turismo.
Por eso decidí publicar esta obra.
Cementerio del arte grutense,
es mandala del solsticio de invierno.
Las Grutas, octubre 2012
Soñé con abuela Lucía Aurora Giménez de Briones, que daba
a sus hijos y nietos la orden: -Urgente, de rodillas, en el nombre de
Nuestra Señora del Carmen, ya den el ADN para que no haya
nunca más ni una sola madre llorando por ese bebé
o por esa niña, que quiero descansar en paz.
24 de marzo de 2017
(viene de la edición anterior)
Ante el desastre educativo de la Ley Federal de Educación que habíamos estudiado por documentos gremiales de Ctera que había ya fracasado en España. Seguro llegaron akí por algún negociado editorial del yuppie ¿a quiénes les vendemos estos clavos de pilas de libros y cursos? Y entonces fue cuando surgió la brillante idea de pasar educación y salud a las provincias sin la guita correspondiente y dejar para los del palo los cargos piolas, buen sueldo, viáticos, viajes…
Fue un verdadero milagro poder recuperar esas neuronas oxidadas por falta de uso… que pudiera leer algo del fútbol… Venía de añares de estudios de humanidades. Feminista y marxista, considerando que el fútbol era una variante más del circo sin pan al pueblo…
Fue cuando leí esa crónica deportiva, apasionante, que mamá me comentó que era de Diego Lucero. Fue mi primera lectura comprensiva, entendiendo qué decía. Por más que lo intentara, las palabras pasaban de largo, como si leyera las letras pero no llegaba a comprender nada, como si entraran por una oreja y salieran por la otra, de largo, paseando por el coco, como sabe cualquier docente les pasa a los chicos en clase en la primavera como es lógico. En la estación en que las flores estallan en mil colores, esa prueba de unitarios y federales con contenidos que en absoluto está en edad de aprender según Piaget.
¿Por qué no les dieron algo más simple y con contenidos más cercanos?
…relacionados con la problemática actual…
Como una noticia escándalo, tipo tapa de “Crónica”: “la culpa de todo la tiene el tomate”
…para analizar si ahora estamos en un federalismo o son políticas unitarias eso de todos los impuestos a nación pero la repartija, nones, de acuerdo a la onda.
Mamá ya estaba en ese reposo absoluto que la llevaría a morir luego, de ese cáncer tan absolutamente doloroso… Es el rencor acumulado, dicen los que saben… añares de tener reprimido, acallado el rencor…
Dicen que hay dos enfermedades de acuerdo a la personalidad. Unos, los apasionados, los exaltados con peligro de ataques cardíacos o cerebrales. Son los que necesitan aprender a meditar para bajar los decibeles. Otros, nosotros, los introvertidos, los que nos callamos y bancamos todo, siempre pacientes, tenemos que llegar a poder decir basta ya.
Si me quedara piola, callada, mansa y tranquila…una depre, seguro, como la vieja. Con un cáncer carcomiendo por dentro… con kilos de comida amontonados en la busarda de tragarme toda turrez.
La mejor dieta, descubrí hace tiempo, es la expresión. Por un lado, escribir cualquier delirio que me inspira la luna. Para tener acción cuerda, firme, cuando tengo que tener paciencia para bancar las turradas del poder…
De alguien que se olvidó del derecho de los pueblos originarios de los niños de Arroyo Los Berros. Porque les kitaron el agua para llevarla a Sierra Grande para la mina de los chinos o los negociones inmobiliarios. Y a la localidad mapuche de Arroyo Los Berros lo transformaron en sólo Los Berros.
Y los derechos de los niños de la escuela de Sargento O’Korn, de Casa de Piedra del lado rionegrino, abusados en su misma escuela por un docente. Luego su escuela se transformó en el Club de Caza y Pesca para los negocios inmobiliarios de turismo frente al lago artificial.
Por “Volver” explican, clarísimo, en la peli de las 5 de la matina, el tema de las apuestas… Atrás irán los que a ver, quién ganó, cuánto, andá, che pibe… agárrenlo, aprieten al gil que ganó tanta guita, hasta que suelte hasta el último sope.
Boggie, el aceitoso, ya sabe cómo. Lo explica, clarísimo, su peli. En canal Encuentro, a la madrugada del 18 de septiembre, Sasturain explica la historieta de Fontanarrosa. Muestra las fotos del fallecido, con ese parecido al dirigente de Boca. Siempre me indignó Boogie. Por eso en mis novelas es el personaje del sicario ex grupo de tareas que dirige SS House, la seguridad privada donde van a parar todos los exonerados de las policías a seguir sus negociados.
Pero con el derecho a la más absoluta libertad de expresión, luego de ese programa tan machista, el canal Encuentro muestra la vida de Alejandra Pizarnik, en el mismo canal, el mismo tiempo-espacio. El dolor por una poetisa nocturna, que no podía hallarse con los trámites diurnos…
…¿Cuántos poetas estarán, ahora, así, como Alejandra o sintiendo como Antonio Porchia: “el sueño que no se alimenta de sueños, desaparece”?
Tal vez los que puedan, como los poetas pampeanos, lograr ese milagro de unir a todos los trabajadores de la cultura, con su ley de protección a los escritores, músicos, teatristas, malabaristas, artesanos, etc, etc. Con su derecho a una jubilación digna y creo que estaban luchando, también, por la obra social y la vivienda en comodato. Me lo mostró el escritor que me dio una copia de la ley que por algún lado estará en este despiole. Seguro fue cuando se supo que solamente los poetas amigos habían ayudado a Bustriazo Ortiz, el autor de “unca bermeja”, ese libro que tenía en la biblioteca, dedicada por el autor, gracias a Ana María Sánchez de García, mi amiga escritora pampeana y que alguien se llevó.
Estaba el poeta totalmente en pedo, perdido ya y fueron sus amigos a buscarle una casa. Me contaron que pasó sus últimos días dignamente, gracias a los que entienden a los poetas y artistas de la luna. Busco en la web algo de él, a quién conocí en algunos de los encuentros de la APE, la Asociación de Escritores Pampeanos. Una frase, terrible, en la entrevista que le realiza: “…cuando esa doctorcita me medicó, me kitó para siempre la imaginación poética”… La atroz iatrogenia psiquiátrica que llueve en nuestra juventud con las raras pastillitas psi del mercado ilegal…
¿Quiénes se tendrán que hacer cargo por ese daño a la cultura provincial y nacional por no haber dado atención digna a un poeta?. Supongo constarán en el hospital neuropsi de Santa Rosa, los años de internación, quiénes fueron los responsables de destruirle la imaginación poética al gran poeta pampeano Bustriazo Ortiz. Supongo que debe estar anotado qué medicación psiquiátrica nacional o internacional le recetaron y qué laboratorios serán los responsables que deberán garpar, imagino, ese daño irreparable pero sí cuantificable, en guita, para multiplicar en cada hospital neuropsi la atención digna para pacientes de salud mental como sí tuvo quién pasó internaciones en el Hospital Moyano y luego en el Hospital de Día del Borda, derecho para apenas unos 60 pacientes en una ciudad con seis millones de habitantes. Y donde se quiere hacer vaya a saber qué negoción inmobiliario con esos hospitales en vez de multiplicar esa atención digna para tantos que lo necesitan.
¿Cuántos pacientes de salud mental son poetas indignamente medicados para destruirles su imaginación poética como a Bustriazo Ortiz, el poeta pampeano?
Tal vez haya que lograr para los artistas viviendas como la Casa del Teatro, ese ejemplo de los artistas del mundo, solidaria, cálida, para quienes dieron toda una vida para el arte. Viviendas en comodato, que sean para otros artistas luego, como logró Regina Pacini, la esposa del presidente Marcelo T. de Alvear.
Akí, solamente está el casino, para los caza incautos… Para que atrás vayan los ex grupos de tarea…
Boogie indica:
-Seguilo, che. Akí tenemos todo grabado. Mostrale al señor las fotos de sus nenes…
Chofitol va con un diario bajo el brazo donde se lee la crónica roja de los terribles aprietes:
-Podemos cubrirlo con nuestra garantizada seguridad privada de excelencia. ¿Leyó esto?
Muestra la imagen de un perrito salvajemente aterrorizado. Como el Churry queriendo ir al mar y ese cartel ominoso, «se prohiben los perros en la playa».
Playa nazi, siente cualquier amante de las mascotas. Emparentados, seguro, con los responsables de la imagen de Jesús, en Bs As, con ese cartelito, “akí no se aceptan perros, niños, ni Testigos de Jehová”. Nazis, seguro.
¿Kiénes vendrán a veranear a una playa así, donde se expulsa hasta a un dulce perrito como el Chu?.
Es que había ido el otro día a la playa… una pareja mayor estaba con un perrito envuelto en una mantita como un bebé.
Yo bajé con el Chu. Y les dije:
-Estoy impulsando que esta playa, la de los acantilados, tenga un cartelito que diga “esta es la playa para los amantes de las mascotas y los niños”. Porque la cubre la marea todos los días dos veces y la limpia a fondo…
-Pero akí dice…-el señor me muestra, temeroso, el cartel que indica que no se puede bajar con perros a la playa. Y quedaron allí, arriba, con el pobre perrito envuelto en su mantita.
El Churry, feliz, saltaba, corría yendo rápido a nuestra playita, AUKA KALFÚ, Rebelde Azul, como la bautizó el pibe de 25 de mayo que estudiaba teatro en Córdoba, aquella vez que vino con su carpita. Era el hermano de quien en un finde aprendió tres tipos de telares y macramé, en el ranchón. Fue hace años, cuando descubrí que hay aptitudes, condiciones, que vaya a saber de qué dependen. Son añares de enseñar artesanías y hay quienes en un año, naranja.
Supongo que será lo mismo para la música. Lo sentí cuando fui a rendir piano en Bahía Blanca. Yo tenía 17 años, maso. El profe tenía algo del aire de J.P.Feinman. El tema del examen era “La marcha turca” de Mozart. Que había practicado en un piano en papel, para tener digitación, porque a la profe que vivía en la esquina podía ir dos veces nomás por semana a tocar el piano. Y el profe tarareaba y tamborileaba, de memoria, los compases. Cuando me equivoqué, por mirarlo, de soslayo, le vi, apenas una mueca. Sentí que evidentemente la música no era lo mío.
¿Por qué si amo tanto la música tengo esta oreja de tapia? ¿sólo para usar unos aros artesanales?
Tal vez sea porque en toda mi escolarización primaria y secundaria solo tuve una profe de música, en 4°grado de una escuela privada cordobesa. Porque la profe tocaba el piano y nos organizó en un coro de tres voces. Mi hermana, en cambio, aprendió flauta dulce en las salitas de 3 y 4 años en Bahía Blanca. Y en la Checoslovaquia de la ex URSS habían demostrado que quienes aprendían música desde niños eran buenos en matemáticas, porque la música tenía esa base que había demostrado Pitágoras. Como quienes jugaban al mecano construyendo grúas y molinos con esas hermosas guías, tenían la base de las ingenierías. Eran de metal, recuerdo, pero podrían hacerse en cartón duro perfectamente, pensé, luego de hablar con el vecino de la ferretería que era el único que conocía el juego.
Aquí tenemos fútbol para tapar todo y nadie sabe porque no hay una secretaría de deportes que distribuya más parejo la guita del fútbol multimillonario para los demás deportes. Los olímpicos implicarían la posibilidad de los chicos a hacer deportes y tener esos viajes para competir en las provinciales, regionales y nacionales. Porque así iban los chicos del pueblo. Sabían que participar en los intercolegiales de diferentes deportes era la posibilidad de viajar, conocer otros chicos, además del placer de practicarlos, obviamente. Tal vez porque no han aprendido música y matemáticas y no conocen eso de la distribución de la guita.
Había recordado el tema de la oreja musical y las matemáticas por el tema de las orejas de Anamá, la profe de yoga, igualitas a las de la bisabuela Cándida de la Rocha de Rivero, grandotas y largas, como las que mostraba Chicha Mariani, la abuela de Plaza de Mayo que busca a su nietita, Clara Anahí y que mostró por tele la foto de su hija desaparecida que tenía esas orejas como las de la abuela de mamá, nuestra bisabuela.
-Son los ancestros- me explicó mi psi en la terapia. No sé por qué supuse que así, tal vez, fuesen las del extinto K. Por el tema del hijo y su nombre, Máximo, tan de los varones de la familia que siempre tenían algún Máximo o Maximiliano. Tal vez fuese algún sobrino lejano, supuse.
Igualitas así, eran las orejas de Susana Jerez, la representante gremial docente rionegrina cuando no me llegaba la jubilación y yo era un papelón andante. Parecía una vieja loca diciendo giladas que había sido docente rionegrina y que me habían dejado en banda… Tal vez haya pensado no podría haber sido colega docente con esa facha.
Miré las orejas de Anamá cuando la encontré en la costanera. Me habían dicho que había logrado maravillas reciclando viejos baldes para llenarlos de plantas… Le conté que estaba queriendo hacer un cerco con botellas descartables como había visto en TN Ecología el sábado pasado.
¿O habrá sido el domingo? -me pregunté cuando todo el día estuve mirando ese canal y ni una sola noticia del programa que esperaba porque habían mostrado que una doctora boliviana enseñaba a hacer una casa con botellas descartables llenas de plásticos que otros las llenaban con arena. Ideales para cercos o talleres, no para vivir, obviamente, porque los plásticos contaminan. Que está en la web, dijo una integrante de la Red Solidaria o alguna otra ong similar. ¿Para un nene trasplantado una casa con plásticos? ¿Y la posible contaminación? A la Fundación Favaloro le faltan especialistas en ciencias ambientales, que son los que unen las ciencias sociales con las naturales… Se necesita, obviamente ese equipo interdisciplinario donde científicos de diferentes palos, con salario y condiciones de trabajo acordes a su curriculum, podrán analizar qué es lo mejor para los trasplantados.
Una vez, en la clase de yoga de Anamá, algo me recordó al que te jedi… No sé qué fue…Tal vez algunas nociones de yoga demasiado superficiales… Entonces le regalé unas fotocopias del curso de yoga de Indra Devi que me había regalado papá. Pero me bloqueé para seguir en sus clases. Recordé el ratonos@ del peor alumno, que asoma, allí, con sus pelos parados, ropas en verde y amarillo, los colores del Brasil, vaya a saber por qué.
Como para no creer en los milagros si en el día de los lápices, la tele muestra al Colegio Monserrat, donde luego de 400 años pudieron estudiar allí mujeres, en la docta, la ciudad de los cordobazos, recién hace tan poco pudieron estudiar mujeres y gays. Lo vi en “Hecho en Argentina”, a24, a las 7,15 hs del domingo 16, en el día de los lápices que siguen escribiendo…
Hasta la imagen del espanto…Laboratorios Bagó fabrica y exporta las vacunas para la aftosa que yo tuve en la época de mi primera comunión. Recuerdo a mamá cosiendo en la Singer a pedal de abuela, tan parecida a la que yo compré en el pueblo, los últimos detalles del vestido, hermoso, de plumetí que usaron las nenas en tantas fiestas, en casa y en la escuela. El empresario explica que siempre tuvo doce horas de trabajo, desde siempre. Se nota que ni piensa en las seis horas de trabajo al valor del salario mínimo, vital y móvil al valor de la canasta básica total…
Seis horas, era una consigna de todos para llegar a paliar la desocupación, como explicaron la OIT y la CTA hace tiempo ya, en el FRENAPO, el Frente Nacional contra la Pobreza. Las fábricas en plena producción, con los turnos diurnos para las alondras, los madrugadores y los horarios nocturnos, para los búhos y lechuzas, que tienen mayor energía noctámbula porque habrían nacido de noche.
Lo deduje al estudiar “El pulso silencioso”, un librito que estudié con Miguel Grimberg en sus clases en la Librería Clásica y Moderna en el año ’81 creo, porque fue cuando le pregunté por un médico para mamá, ya desahuciada totalmente y me recomendó al dr Roberto Crottogini que llegó con su onda luminosa a ayudarla en sus últimos momentos y fue luego nuestro médico de familia. Y por quién conocí a mi terapeuta, el dr Daniel Coiffman que daba sus clases de yoga para niños en el templo de Sai Baba, donde yo iba entonces, aprendiendo la respiración diafragmática que es la base del parto sin dolor, que es sin temor y los chakras hindúes, con esa ubicación que tiene tanta similitud con los estudios de Wilhelm Reich de los centros de energía, desarrollados en varios de sus textos, pero fundamentalmente en “La función del orgasmo”.
Cuando Lorena me mostró su operación de tiroides, imaginé con horror, las palabras no dichas, acalladas, porque allí está el chakra de la expresión y la comunicación, tema que no se estudia en nuestras universidades de medicina. ¿Y si fuese acaso travesti? Y para sacarle las palabras le quitaron la nuez de adán, imaginé espantada…Cuántas cosas quisiera, tal vez, poder decir ese silencio…
Y eso, seguro, fue lo que me devolvió las ganas de escribir. Los lápices siguen escribiendo me dije cuando las palabras se me agolpaban en las largas esperas en el Banco Nación, al lado de la señora que leía una biografía de Marx, de un autor inglés o yanqui. Era egresada de un colegio normal donde había leído 18 libros en la secundaria… Recordé a quien leía más de uno por día, cuando llevé los cien libritos de la colección de Anteojito que mis hijas apenas habrán ojeado. Y los leyó, todos de una, en esos días en que leía desesperadamente, para salir de esa vida horrible, seguro. La escuela, privada, religiosa, donde las pibas la veían un ratón de biblioteca…en vez de estar, como todas, preocupadas por la pilchita. Hasta que pasó a ser, “Yo, la peor de todas”…como sor Juana Inés de la Cruz, mujer intelectual de fuste, en esa América donde el mayor pecado era ser intelectual y mujer. Que en la docta recién hayan podido estudiar mujeres en el Colegio Monserrat, jesuita, de Córdoba, luego de 400 años. Pensarían como Aristóteles que las mujeres somos bípedos implumes o ese otro misógino de Shopenhauer: “la mujer es un animal de pelo largo e ideas cortas”
Por el agua de aquí, con residuos de soda cáustica, tal vez, por el tema de los litros y litros de agua de purga de Alkalis y donde tira esos miles de litros de agua contaminada. ¿Adónde van? ¿al mar y chau ballenas, pensamos en algún momento…? Pero las ballenas estaban, seguro, ese día en que estuvieron bailando delante nuestro los delfines o toninas.
¿Cuándo se podrá analizar el agua potable de la canilla? Sencillamente llenando una botellita, sellarla y analizarla en el laboratorio del hospital público para saber si realmente es incolora, inodora e insípida o si tiene algún residuo de algo extraño. Un temita para los que estudian bioquímica en las universidades.
Y para los estudiantes de Contador, Economía y Administración, podría interesarles estudiar el valor de las compus de educación. Parece un “Operativo retorno”. Se conseguía en klaro una net a 1000$ cuando a educación de la nación le costaban 6600$ y a educación de la capital 8800$. Y en un negocio del ramo estaban a 3500$. Dicen que en Tierra del Fuego, simplemente se armarían poniéndoles la carcasa porque lo de adentro vendría en los barcos chinos. Dirigidos por los piratas del caribe sur que viajarían en cruceros de turismo vip, pileta climatizada bailando salsa a bordo del Titanic. Así dicen los contreras que ubicaron rápidamente allí al autor de la caricatura infame de Mahoma que desatara tanta violencia islámica…Tiene el mismo estilo, el trazo igualito…
El tema saltó por la heroica huelga, ominosamente silenciada, de los docentes santacruceños el año pasado, luchando meses contra el ninguneo de las autoridades provinciales y nacionales. Fueron ellos los que destaparon la olla. Parece que las net para educación, de Tierra del Fuego pasarían a Puerto Arenas, que es puerto libre chileno…donde se conseguiría a chauchitas…luego entrarían por la cordillera donde los primos de San Juan organizarían el negoción.
Esta es la razón por la cual siguen sin clases los santacruceños, dicen en los sueños las conversaciones del Trostky, nuestro perrazo vilmente asesinado por portación de nombre cuando se encuentra en la placita con Garufa, el perrazo ecologista, también asesinado porque sí, nomás. En su moto toma unos mates del ciclista ecologista y comparten los poemas ilustrados que reparten en sus mochilas porque ambos han reencarnado en otros, que solamente reconocen quiénes los amaron.
Dejé de escribir para escuchar el excelente programa de entrevistas de Aliverti del domingo a la mañana por Radio Nacional que tiene la onda de mi hermano Rodrigo por las preguntas inteligentes y con buena onda. Estaba Diego Golombec, el autor del librito de genética para todos, “Sexo, drogas y algo de biología” de la Universidad de Quilmes. Cuando hizo una pragmática defensa del inglés en las ciencias recordé cuando estudiaba la maestría de historia en la Universidad del Comahue en Neuquén y quien era rector entonces, el dr Calderón nos vino a decir que ponían inglés obligatorio y yo defendí el derecho al poli-lingüismo. Que tuviéramos, sí, que aprobar otro idioma, pero a elección. ¿por qué inglés si es el lenguaje de la dominación? Que lo elijan quienes lo quieran. Si hay aparatitos de traducción simultánea y además en la misma universidad estaba la facultad de idiomas con egresados del traductorado que sabrían perfectamente cómo expresar ese concepto o giro idiomático. Como cuentan Les Luthiers yo jamás pasé de «you are the pencil». Haría papelones ante los de ciencias duras con ingles de Oxford desde sus tres años. Que esa compañera hija de exiliados en la dictadura que trabajaba traduciendo italiano, pudiera especializarse y nos ayudaría a todos nosotros que teníamos textos en todos los idiomas. Y por qué no mapuche a esa compañera de rostro indudablemente indígena que podría socializar sus saberes a los paisanos.
Evidentemente es indispensable que en todas las universidades haya cátedras de Antropología Cultural. En Odontología, por esa concepción de intentar con aparatos hacerles dentaduras barbie a mandíbulas con prognatismo de australopithecus a descendientes de pueblos originarios o afroamericanos. Para que a los 30 años tengan los dientes flojos para hacerles luego implantes o dentaduras postizas saca y pon para los mil roles del yuppie. Y unos buenos sopes para quienes hacen ese negoción.
Y en las facultades de medicina y enfermería enseñar diferentes opciones de sanación. ¿por qué esa dictadura de las vacunas cuando sabemos de los negocios de la obra social bancaria con los remedios truchos para enfermos de cáncer, sida y hemofilia? ¿Obligar a vacunar a bebés que siguen las dietas Ayurveda del dr Chopra o la antroposofía del dr Crottogini que me explicara que eran indispensable solamente cuando hay problemas de talla y peso y condiciones de pobreza extrema. Si yo me hubiera puesto las vacunas del PAMI a los viejitos, tal vez no tendría la salud de casi no haberme engripado en tantos años sin obra social, curándome con los tés de cebolla, miel y limón de abuela, de la medicina de los pueblos originarios que parecen giladas supersticiosas a los egresados que parecen solo aprender medicina de los EEUU y no como en la Chile de Allende, donde se estudiaba la validez o no de la medicina popular. En el Hospital Tornú cuando fui a hacerme ver por un neumotórax, un dr me explicó que así, con cebolla, curaban a los tuberculosos antes de los antibióticos. Obviamente desde entonces incorporo las ensaladas de cebolla con limón y trocitos de naranja o mandarina con perejil todo el año, porque además de neumotórax tuve neumonía y asma. Que me curé cuando al separarme volví a dormir con la ventana abierta del sur, donde entra el viento frío patagónico y las ventanas del norte porque «donde entra el sol se va el médico» decía mamá.
Era cuando quería escribir el tema del taller literario… «La sonrisa de la luna»… y no se me ocurre nada… mejor me voy a leer el diario Río Negro del domingo, metida en la cama, para ver si hay algún temita interesante que me inspire. Nada tan interesante como leer al menos un diario por semana. Se lo había encargado al diariero vecino, que parece Maradona en moto, en su casa de templo evangélico inconcluso. Hace unas semanas que no viene. ¿Será por lo que reclamaban los canillitas del 33% de comisión por venta? ¿Se perderían los niños ese excelente suplemento “El universo”, de VISOR, con esa historia que es un cuento apasionante de la vida de Copérnico: “Un sabio tímido”. Con esos temas de la universidad de Río Negro tan chusmetes, justo cuando me habían dicho que era excelente el nivel de sus carreras a distancia, gratarolas.
Mientras Boogie afila sus mascarillas de calaveras en las tizas desde que era alumno. Yo tuve una de esas obras de arte totémicas cuando impulsaba a estudiar plástica, que solamente en Neuquén era de dos años y medio. Una carrera piola, solo dos horas de clase por día, un salario misérrimo, pero deja tiempo para crear, hacer murales, esculturas en chatarra como ese artista que hace dinosaurios inmensos casi perfectos…o música.
-Vos ya sabes que jamás vas a lograr que a los pibes de las escuelas barriales les llegue nada a menos que la Fundación Música Esperanza los organice.
Hasta que fui a dar mis prácticas para terminar mi carrera del profesorado de Historia por la Universidad Nacional del Comahue en 1997, a la edad en que mis compañeras de la Universidad Nacional del Sur ya estarían por jubilarse.
Era la escuela secundaria neuquina del barrio Paso del rey, de chalets mansiones casi, cuyos hijos irían todos a escuelas privadas, diría, porque mis alumnos eran como aquel que la profe, con aire piola le preguntó a un pibe: ¿otra vez problemas con la ley?
Cuando llegué a la entrada de la escuela había inmensos mascarones de papel maché hechos por todos, alumnos y profes. Parecían los de las fallas valencianas. Se preparaban para festejar el año nuevo mapuche, quemándolas. Y que yo propuse hacer aquí, frente al mar, para evitar incendios, en algunas de esas novelas perdidas en el ciber-espacio porque los técnicos en compu ignoran lo que leí en unos viejos diarios página 12, en unos artículos muy interesantes de Ariel Garbaitz donde explicaban que era absolutamente imposible se borraran del disco rígido. Razón por la cual los de SS House, Su Seguridad Privada, saben perfectamente los secretos de todos, porque están los de inteligencia desde siempre, todos libres y por allí, como siempre, y en los medios, obviamente.
En lo que sería la portería, había un pilón de guitarras y algunos órganos. ¿Y eso qué es?, le pregunté a la cálida profe ayudante de las prácticas de la enseñanza, que además de ser profe y licenciada en Historia estaba haciendo la maestría en didáctica, pero dejó luego el cargo de profe universitaria, indispensable, por su sabiduría y buena onda, por uno de preceptora en una escuela secundaria porque era mejor salario y tenía entonces el diagnóstico de HIV con algunos de los tratamientos de entonces.
-Todos traemos los instrumentos musicales para compartir con los chicos para sus clases de música.
Me quedé absolutamente maravillada… Tenían internet en la escuela porque todos aportaban un peso por mes para la conexión. Cuando intenté lograr lo mismo en el pueblo no se pudo vaya a saber por qué.
El aula estaba llenísima, unos 33 chicos, tan lejos de lo que planteaba Ctera, aulas de 20 alumnos, con un metro cuadrado por alumno. Y cada docente con un ayudante pedagógico por aula, para poder ayudar a los pibes particularizando la clase. Como el tema de los bondis, además del conductor, un guarda para los boletos y de paso poder mirar a los que se ubican ahí atrás haciendo líos. Pero como la escuela tenía equipo pedagógico, asistente social, ayuda en las materias, solamente un pibe no llegó a cursar la materia, por demasiadas faltas.
Estaba oyendo en la Radio Pública, a la mañana, “Hoy más que nunca”, con la voz y modismos de Aníbal Fernández, siempre tan agudo… Pasé, entonces a Víctor Hugo, en Continental, con esa onda del despotismo ilustrado, con su defensa apasionada del futbol para todos… y siempre me pregunto cuándo harán una secretaría de deportes que distribuya como corresponda para todos los deportes, fundamentalmente los olímpicos, para los pibes entrenamiento local y la posibilidad de viajar a las provinciales y nacionales. Porque los deportistas contaban que en el polideportivo local los horarios de entrenamiento eran imposibles para los que además trabajan y estudian.
Recuerdo con añoranza esa fotocopia de Ausubel que trabajé con los chicos en mis últimas clases, espantados porque eran unas 36 carillas y eran chicos que pensaban ir a la universidad para regresar, luego a ser los ni-ni del pueblo, a menos que tuvieran padres que los ubicaran en algún cargo público. Explicaba Ausubel que si el capitalismo tenía como eje ideológico la libertad, el socialismo se centraba en la igualdad y quedaba aún la fraternidad del ideario de la revolución francesa por realizar.
El yuppie, mientras lee los discursos, prepara las pelis donde los chicos de la escuela hacen los actos escolares. Belgrano, igualito al jefe de gobierno, en unas escuelas contreras; en otras es San Martín mientras los pibes ensayan el «no te tenemos miedo». A Rivadavia, obvio…
En la noche antes del aniversario de la muerte de mamá, me dormí mirando la foto de Pablito con mi roana, abrazando a Evelyn. Siempre supe que era el día de la Mater Dolorosa. Así era mamá, sentí. Como si fuera esa imagen de La Pietá de Michellangelo, absolutamente desolada, preguntándose por qué si era así, tan bueno…
Pero en la mañana del 15 de septiembre, vaya a saber por qué me puse a leer esas dos revistitas de los testigos… ¿habrá siempre violencia? ¿existen los milagros?
Si me sentía llena de violencia interior…
En los cacerolazos se oían los reclamos totalmente silenciados de las seis horas de trabajo al valor de la canasta básica total.
Supuse que muchos de mis ex-alumnos, mientras trabajan mil horas en infames calls centers en negro, sin cobertura social, recordarán cuando estudiaron conmigo el volante de la CTA en los tiempos del FRENAPO, el Frente Nacional contra la Pobreza, totalmente olvidado, parece. Era antes que me jubilara y que yo estudié con los chicos en clase, en Metodología de la Investigación Social en el Colegio Dermidio Cejas de 25 de mayo, La Pampa. Para solucionar el tremendo problema mundial de la desocupación la OIT decía que así, exigiendo la reducción de la jornada de trabajo, se incorporarían al trabajo miles de desocupados… ¿Pero a qué canasta básica? ¿La del INDEC? Los indignados y los callados sonidos del silencio de la procesión salteña piden, como en la revolución mexica con el pendón de la virgen de Guadalupe, lo mismo que en la revolución rusa de 1917, paz, pan y trabajo.
Paso a prender la radio, al excelente programa de Felipe Pigna en Radio Nacional, la Radio Pública. A ver si explican algo. Se siente en el aire la onda de golpe cívico-militar cuando vemos a miles de suboficiales de la prefectura y la gendarmería que les bajaron la mitad del sueldo. Mientras sus jefes cobran millonadas. Para dar las órdenes de reprimir a los que tampoco cobran ese salario que debería ser el salario mínimo vital y móvil, para todos los trabajadores. Para eso deberían bajarse los salarios de jeques árabes de los que deciden. Ya sabemos que en la Argentina los jefes cobran 90 veces más que la base de la pirámide. Y la única manera de solucionar es cuando todos tengamos una equiparación salarial de acuerdo a la canasta básica total. Cuando puedan todos los trabajadores tener esa base se solucionarán los reclamos, sino cada sector que no lo tenga reclamará en corte de ruta o toma de Buenos Aires.
Pero se deberá tener algo más, una equiparación de todo el conjunto de trabajadores. Porque en la base judicial están los que ni siquiera cobran, mientras los jueces parecen los duques y marqueses de la democracia. Y los abogados de la carrera judicial con ocho años de estudio vaya a saber si pueden lograr lo que ahora exigen, con justa razón los prefectos y gendarmes con un año de carrera y condiciones miserables para ser la mano de obra barata para la represión. Pero los docentes cobran mucho menos y los médicos y enfermeros también. Para ser reprimidos por quienes son enviados de cualquier lado del país solamente para acallarlos con la fuerza pública.
¿Por qué no implementar una carrera de seguridad donde los ascensos sean por capacitación en DDHH además de cubrir la escolaridad secundaria obligatoria que seguro les falta a muchos? Sería mucho más digno que además de cubrir puestos cada día tengan dos horas de estudio. En lugares donde tengan ese derecho a la alimentación y baño que hoy carecen. Y entonces puedan ascender en toda la carrera, sin la antipática división de jefes y tropa según su origen, tan medieval.
Y equiparar a todos los trabajadores en una escala que debería acordarse en conjunto. Algo como si el cargo de comisario sea igual al del director del hospital y de escuela. Y el salario mínimo el de la línea de pobreza. No como hoy en San Antonio Oeste, donde un licenciado en servicio social cobra una “beca” menor que la línea de indigencia en un trabajo sin tiempos.
-¡Rajemos, compañeros!…Figuretti, con su agilidad mix del técnico de River con la labia de Luis Zamora, el dirigente político marxista que voté alguna vez y algo de Aníbal Ibarra, el dirigente porteño que terminó por el culturicidio de Cromagnon, va guardando sus pilchas en las maletas… Se mira al espejo con su sonrisa de publicidad de dentífricos. ¿París, Roma o Madrid?
-Nadie es profeta en su tierra- sentencia, amargo, Ratatouille, como lo bautizara el yuppie por ser rata, amarrete, cada vez que intenta algunas de sus pelis.
Ratatouille hace piruetas onda Cirque du soleil con la gracia de prima ballerina de Gisellle. Mientras, Boogie talla, obscuro, con su navajita una maderita. Ambos saben, perfectamente, que es comandante de aeronáutica, experto en comunicaciones, con pronunciación perfecta de inglés, francés y portugués desde su niñez.
Por su culpa, se raya, el yuppie con su aire tinelláceo, el rol de gurú a Chofitol fue la gota que rebasó en cacerolazos indignados… Ese aire de manochanta en la ciudad de quienes hace años meditan zen, yoga hindú o tibetano, con las sutiles diferencias de ésta o aquella…
Rattatouille tenía el phisic du rol, con experiencia de años de dirigir meditaciones varias. Pero Boogie lo odiaba visceralmente desde que había propuesto una resurrección en masa, citando obscuros textos. Ambos eran dirigentes de diferentes cultos y la divergencia era la fecha del fin. ¿Una meditación todos de vestidos de blanco, en un ommm grupal? ¿Una quema de todos los documentos truchos en ceremonias tribales, bailando alrededor de una fogata ritual?
Fue cuando llegó la orden estentórea de:
-Nada de hacerse los otarios. No sé, querido, si en el día del milagro, de la primavera o el 24 de septiembre, día de la Virgen de la Merced, cuando Belgrano donó para las escuelas su salario. No se cómo, pero akí todos los muertos de las FFAA aparecen con vida. ¿Entendió, querido?
Del otro lado del teléfono aturdió al superjefe de las FFAA locales una voz que parecía la de Chavez.
– Porque si no aparecen los padres de estos pibes mi carrera termina como la de Paraguay. Estoy harto de los chistes de ¿Ud. sabe, comandante cuántos padres de la patria tiene entre su tropa? O akí va otra inmaculada virgen, concebida por obra y gracia del espíritu santo porque el uniformado simplemente dijo, groseramente, yo, forrito, never, que me lo venga a poner la doctorcita o la señorita.
Y el tema eran las elecciones venezolanas y de EEUU; el teléfono blanco de los de arriba que con ese tono inglés yankilandia preguntaba para cuándo…
Cuando el proyecto de la planta nuclear en Sierra Grande amenazó a las ballenas de los mares del sur, llegaron las voces de sus congéneres desde Ghana, donde tienen la Fragata Libertad por la infame deuda de los fondos buitres, donde fueron a parar mis bonos rionegrinos que me cambiaba a un 60% de efeté, criollos que sabían su valor. De África llegaron las voces de las amenazadas ballenas, tan bellas, preocupadas por su extinción…Que los fondos nacionales que estan en el exterior garpen a los fondos buitres si en el plazo perentorio de 48 hs no regresan a la Argentina. Porque obviamente nosotros, simples mortales, no sabemos en qué cuenta top secret estarán, pero los fondos buitres sí los ubicarán, en New York, las Islas Caymán o Punta del Este…
-¡¡¡Rajemos!!!…Les dejamos este quilombete…y nos vamos con los verdes…
-¿Ecologistas? ¿Con los nazis de Greanpeace, ni en pedo?- se indignan a coro. -los verdes dólares, che, son fieles, nos siguen…
Para que los lápices sigan escribiendo, boleto educativo nacional, gratis, a estudiantes, docentes y no docentes de todos los niveles educativos, como en Córdoba.
O para que represente esta obra, unicamente alguien como el actor Miguel Ángel Solá, porque solamente un actor como él pudo hacerme sentir la terrible angustia de la pérdida irreparable del mural de Páez Vilaró de la ex delegación municipal de Las grutas. Para que se pueda construir, con la urgencia de hacerme sentir: “lo primero es antes”…el teatro de títeres sobre el horrendo agujero de la ex delegación municipal de las grutas, Río Negro…que diga algo como…
«Tengo solamente solamente un sueño…»
Ante el horror absolutamente intolerable que puede hacerme sentir…lo que solamente puede ser suponer, imaginar…que si no logra realizar lo que yo sentí…y que parece absolutamente imposible de lograr: un bellísimo teatro de títeres totalmente transparente…que tiene que ser exactamente igual algo absolutamente imposible de lograr…
Como esa maqueta que está en el museo de maquetas de la facultad de arquitectura de la UBA…
…que parecía un barco de acrílico…absolutamente transparente…cuyo nombre tenía que ser…el de la peli “La nave de los lokos”…para instalar en ese sitio…
…con la urgencia que requiere…antes que sea demasiado tarde…
…y que se decida ante las donaciones de millones de sopes de artistas de cualquier parte del mundo…
…que primero hay que decidir si éste o akel otro proyecto…
…y si los realizadores deben ser antes aprobados por…
Con algo del gesto que solamente un artista como Pablo Beker podía expresar cuando íbamos a su bello depto, de la calle Terrero al 1300, a unas cuadras de la placita Irlanda…
Con ese tono con el que nos contaba a nosotras lo que había dicho Michellangelo cuando el papa le había puesto unos ayudantes para que lo ayudaran a terminar su pintura del techo de la Capilla Sixtina…Y sin mirarlos sikiera, le ordenó al papa que les pagara todo lo que exigían, para poder terminar de pintar esa obra, su pintura…
Y entonces, cuando el celebérrimo artista, Premio Nacional de Bellas Artes y poeta undergroung que nos dedicó algunos de sus libros, hizo uno de esos silencios de poeta…
Y una de las nenas le preguntó:
-¿Y qué hizo, entonces?
…Con esa mirada insondable de los artistas, contestó:
-Simplemente habrá limpiado lo que habían hecho a su obra. Sin una sola palabra, habrá tomado su pincel…y habrá seguido pintando, con esa absoluta dedicación a su obra…
FIN
Columnista invitada
Lucía Isabel Briones Costa
“Mi pecado fue terrible: quise llenar de estrellas el corazón de los hombres” decía el poeta… Desde los lejanos años de estudiante del profesorado en Historia en la Universidad Nacional del Sur, dediqué mi vida a la educación. En los tiempos previos a la dictadura de 1976 enseñaba en una vieja aula de la Facultad de Agronomía el bachillerato de adultos, tarea compartida con los compañeros, casi todos presos políticos después en Bahía Blanca. Cuando era rector Remus Tetu se hizo una razzia contra docentes, no docentes y estudiantes, especialmente contra los alumnos de Humanidades, Sociología y Economía. Estaba terminando mi carrera, cursando las últimas materias cuando fui detenida y puesta a disposición del PEN, el Poder Ejecutivo de la Nación, durante tres años y tres meses, hasta diciembre de 1978. Estuve en las cárceles de Villa Floresta, Olmos, Devoto y los tres últimos meses en la U20, la cárcel dentro del Hospital Borda, donde un prolijo tratamiento con drogas psiquiátricas hizo borrar totalmente mi memoria. Así me dejaron en libertad, diciéndole a mi padre: “Su hija es irrecuperable, será un vegetal hasta el día de su muerte. Que Dios les de la Santa Resignación”. Gracias a haber encontrado la ayuda adecuada pude recuperar, poco a poco, la razón perdida. Y me fui a La Pampa, donde fui docente de escuelas primarias y secundarias en la pequeña localidad de 25 de Mayo y en el Terciario de Formación Docente de Catriel, Río Negro. Recién en 1997, pude terminar mi profesorado en la Universidad del Comahue, para cuando mis compañeras de promoción de la Universidad del Sur ya estaban por jubilarse. Luego comencé la maestría en Historia Latinoamericana de los siglos XIX y XX, la cual se interrumpió cuando la Universidad no podía pagar a los docentes, varios doctores en Historia. En ese tiempo de docente rural comencé a escribir narrativa, tarea que continué al jubilarme en el bello mar de Las Grutas, en Río Negro. Seguí escribiendo con la alegría de dar un legado en su educación a mis hijas: la mayor psicóloga y la menor, maestra y profesora de Historia, ambas egresadas también de la Universidad del Comahue.


